¿Cuándo puede comer yogur el bebé?

¿Es seguro el yogur para mi bebé?

El yogur natural en pequeñas cantidades puede darse al bebé alrededor de los nueve meses, aunque lo ideal es que cuentes con la aprobación del pediatra del bebé.

Se recomienda alimentar con yogur suave mientras se acostumbra a las nuevas texturas, y sólo con productos pasteurizados y sin azúcares añadidos.

Es recomendable optar por una versión entera del yogur, ya que el bebé necesita grasa para crecer y desarrollarse adecuadamente.

Debes introducir el yogur como lo harías con cualquier otro alimento nuevo (de uno en uno, para ver cómo responde tu bebé).

¿Qué tipo de yogur debo dar a mi bebé?

Yogur pasteurizado: la mayoría de los yogures que encontrarás en los supermercados están hechos con leche pasteurizada, que es segura para los bebés, ya que ha sido tratada térmicamente para eliminar cualquier bacteria.

Yogur sin azúcares añadidos: el yogur elaborado sin azúcares añadidos es más saludable para tu bebé y le ayudará a proteger sus dientes incipientes.

Yogur griego: el yogur griego natural es una gran opción para los bebés y los niños pequeños, ya que es rico en proteínas y fácil de digerir. Además, está más colado que el yogur tradicional que se encuentra en el supermercado, por lo que es menos frecuente que se produzca una intolerancia (a ingredientes como el suero). Sólo tienes que optar por un yogur griego natural.

¿Qué tipos de yogur NO son adecuados para los bebés?

Yogur crudo o sin pasteurizar.
Yogur bajo en grasa o desnatados.
Yogures de frutas o yogures no naturales.
Yogur con miel.
Yogur sin lácteos (a menos que lo aconseje un profesional de la salud).

Cómo introducir el yogur a tu bebé

Empieza dándole pequeñas cantidades de yogur natural en una cuchara para bebés, para que se acostumbre a su nuevo sabor y textura. También puedes probar a añadirlo a los copos de avena en lugar de la leche.

Añade un poco de dulzor natural a su yogur mezclándolo con salsa de manzana casera o con su fruta favorita, finamente mezclada, como el plátano.

Cuando tu bebé se haya acostumbrado a comer alimentos sólidos, puedes probar con yogur natural congelado o yogur griego congelado, servido con fruta mezclada para darle más sabor. Perfecto para los días calurosos de verano.

beneficios del yogur para los bebés

Grasas.
Calcio.
Proteínas (para el crecimiento y la reparación).
Probióticos (para la producción de anticuerpos y un sistema inmunitario sano).
Vitaminas A y D (para la salud del sistema inmunitario, la piel y la vista).
Vitamina B2 (riboflavina - para la salud de la piel, los ojos y el sistema nervioso).
Vitamina B12 (para fabricar glóbulos rojos y liberar energía de los alimentos).
Magnesio (para la salud de los huesos y la energía).
Potasio (para la salud del corazón, los músculos y los nervios).

Bueno para el sistema inmunitario: La presencia de ácido láctico en el yogur es muy eficaz para crear un buen sistema inmunitario en los bebés. El consumo regular de yogur elimina las bacterias causantes de enfermedades (diarrea, disentería, etc.) del estómago.

Es beneficioso para los problemas gástricos: El ácido láctico del yogur ayuda a neutralizar el equilibrio ácido-alcalino del cuerpo. Esto ayuda a mantener a raya la irritación del estómago y los problemas gástricos.

Eficaz en el tratamiento de la diarrea: El yogur no sólo mantiene a raya la diarrea, sino que también es eficaz para tratarla. Se ha demostrado en un estudio que los bebés alimentados con yogur junto con el tratamiento estándar de la diarrea se recuperaron más rápidamente en comparación con los bebés que sólo recibieron el tratamiento y no el yogur.

Cargado de nutrientes: El yogur está repleto de nutrientes y es un alimento ideal para un bebé en crecimiento. Contiene vitaminas A, C, B-6, D, E, K, riboflavina, folato y niacina. La presencia de calcio, fósforo, potasio, magnesio, zinc, sodio y otros minerales es beneficiosa para el desarrollo general del bebé.

Ayuda a tratar las infecciones de las vías urinarias: El yogur ayuda a tratar las infecciones de las vías urinarias en los bebés. La presencia de probióticos ayuda a curar la infección y alivia la sensación de ardor al orinar.

Qué son los probióticos y por qué son buenos para los bebés

El yogur puede contener probióticos, que son muy beneficiosos para la salud de tu bebé. Los cultivos vivos o probióticos, que se utilizan para elaborar el yogur a partir de la leche, contribuyen al crecimiento de bacterias buenas en el intestino del bebé. Sin embargo, no todas las variedades de yogur contienen probióticos o cultivos vivos. Entonces surge la pregunta de cómo se puede determinar si una marca concreta de yogur contiene bacterias buenas o no. Aunque no hay una forma segura de establecerlo, puedes buscar la información en la etiqueta.

¿Qué hacer si tu bebé es alérgico a la leche o tiene intolerancia a la lactosa?

Si tu bebé es alérgico a la leche o tiene intolerancia a la lactosa, se recomienda que no le des yogur sin consultarlo con el médico. Sin embargo, si no estás segura de que el yogur o cualquier producto lácteo haya provocado la reacción alérgica en tu bebé, debes esperar al menos tres días antes de volver a dárselo. Así podrás saber mejor si fue el yogur o cualquier otro alimento el que provocó la reacción alérgica.

La reacción alérgica puede provocar manchas rojas que pican, hinchazón alrededor de la boca o vómitos. Estos síntomas pueden aparecer en las dos o tres horas siguientes a la introducción del alimento.

Aunque la intolerancia a la lactosa no es tan común en los bebés, si tu bebé la tiene, puedes darle yogur. Esto se debe a que el proceso de elaboración del yogur descompone la gran cantidad de lactosa de la leche, lo que hace que los bebés la toleren fácilmente.

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Detalles: Escrito por: Estefanía Morera; Categoría: Alimentación Infantil; Última actualización: 18 Agosto 2022

¿Cuándo pueden los bebés comer yogur?