¿Qué es la implantación?
Después de que el espermatozoide y el óvulo se unen (fecundación), las células combinadas comienzan a multiplicarse bastante rápido y se mueven a través de una de las trompas de Falopio hasta el útero. Este grupo de células de crecimiento rápido se llama blastocisto.
Una vez en el útero, este pequeño paquete de células tiene que unirse o implantarse en su pared uterina. Este paso, conocido como implantación, desencadena niveles crecientes de todas esas divertidas hormonas del embarazo (estrógeno, progesterona y hCG, o gonadotropina coriónica humana).
Si no se realiza la implantación, el revestimiento uterino se desprende en el período mensual normal, una decepción grave si estás tratando de quedar embarazada, pero un recordatorio de que el cuerpo probablemente se está preparando para que lo intentes nuevamente.
Pero si ocurre la implantación, las hormonas hacen que la placenta y el embrión (futuro bebé) se desarrollen y el revestimiento uterino permanezca en su lugar y apoye el embarazo.
La implantación se realiza entre 6 y 12 días después de la ovulación. Ocurre más comúnmente de 8 a 9 días después de la fecundación. Por lo tanto, la fecha exacta de implantación puede depender de cuándo ovulaste y de si la fecundación ocurrió temprano o tarde en la ventana de ovulación.
Cuando esperas quedar embarazada, es natural estar muy consciente del cuerpo y notar cada cambio, sin importar cuán pequeño sea.
¿La falta de síntomas significa que no estás embarazada? No tan rápido. Ten en cuenta que la mayoría de las mujeres no experimentan signos de implantación, y están embarazadas.
A continuación hablaremos de algunos síntomas que podrías notar si se hubiera producido la implantación, pero ten en cuenta que tener los síntomas que se van a enumerar no significa necesariamente que estés embarazada, y no tener síntomas no significa necesariamente que no lo estés.
Posibles signos de implantación
Sangrado
En realidad, no está claro qué tan común es el sangrado de implantación. Algunas fuentes afirman que un tercio de todas las mujeres que quedan embarazadas experimentan sangrado de implantación, pero esto en realidad no está respaldado por investigaciones.
Hasta el 25 por ciento de las mujeres experimentan sangrado o manchado en el primer trimestre, y la implantación es una de las causas.
Este sangrado puede ser confuso, porque puede ocurrir alrededor del momento en que comenzaría el período regular. Sin embargo, lo más común es que ocurran unos días o una semana antes de cuando esperas tu período menstrual.
Existen otras diferencias que pueden ayudar a determinar si estás experimentando sangrado de implantación o período:
- Es probable que el sangrado de implantación sea de color rosa claro o marrón (a diferencia del rojo brillante u oscuro de su período).
- El sangrado de implantación se parece más a las manchas que a un flujo real de sangre.
- Este manchado puede ocurrir una vez, o durar unas pocas horas, o incluso hasta tres días. Puedes notar un flujo rosa o marrón cuando te limpias o en la ropa interior, pero no necesitarás una compresa.
Calambres
No es ningún secreto que el embarazo temprano causa un cambio rápido de hormonas. Más específicamente, la implantación es un desencadenante del aumento hormonal, es por eso que no puedes obtener esa segunda línea rosa en una prueba de embarazo hasta después de la implantación.
Y la marea hormonal cambiante también puede causar calambres. Además, están sucediendo muchas cosas en el útero a medida que el óvulo fertilizado se implanta y comienza a crecer.
Si bien no hay investigaciones que indiquen que el implante en sí mismo causa calambres, algunas mujeres sienten sensibilidad abdominal, dolor de espalda baja o calambres alrededor del momento de la implantación. Esto puede parecer una versión leve de cómo te sientes antes de que comience la menstruación.
Flujo
Si ha estado observando tu moco cervical, puedes ser consciente si ocurren cambios alrededor del momento de la implantación.
Durante la ovulación, el flujo cervical será clara, elástica y resbaladiza (algo así como las claras de huevo).
Después de que se produce la implantación, el flujo puede tener una textura más gruesa y "más gomosa" y ser transparente o de color blanco.
Y en los primeros días del embarazo, el aumento de la progesterona y el estrógeno puede hacer que el flujo se vuelva aún más espesa, más profusa y de color blanco o amarillo.
Sin embargo, el flujo cervical puede verse afectado por una serie de cosas (hormonas, estrés, relaciones íntimas, embarazo, sangrado de implantación o menstruación) y puede no ser un indicador confiable de si la implantación se produjo o no.
Hinchazón
El aumento de la progesterona (que ocurre al comienzo del embarazo) ralentiza el sistema digestivo. Esto puede hacerte sentir hinchada. Pero eso también puede ser un síntoma muy común del período. ¿Quieres saber por qué? La progesterona también aumenta cuando el período es inminente.
Senos sensibles
Después de la implantación, los niveles de hCG, estrógeno y progesterona aumentan rápidamente. Esto puede causar que los senos se sientan muy doloridos. Si bien muchas mujeres experimentan hinchazón o sensibilidad en los senos antes de los períodos, es probable que esto sea más notable de lo normal al comienzo del embarazo.
Náuseas
Posiblemente el más famoso de los primeros síntomas del embarazo: náuseas, también conocido como "náuseas matutinas" (aunque puede ocurrir en cualquier momento del día).
El aumento de los niveles de progesterona después de la implantación puede provocar náuseas. Pero nuevamente, esto ocurre más comúnmente alrededor de las 4 o 5 semanas de embarazo (aproximadamente el momento en que pierdes tu período).
La progesterona ralentiza la digestión, lo que puede contribuir a las náuseas. El aumento de los niveles de hCG y un sentido del olfato más sensible pueden empeorar el problema.
Dolores de cabeza
Si bien son buenos y necesarios para un embarazo exitoso, esos niveles hormonales en aumento (particularmente la progesterona) también pueden causar dolores de cabeza después de la implantación.
Cambios de humor
¿Te encuentras contenta y feliz y un minuto después, estás llorando por un anuncio en la televisión? ¿O emocionada de ver a tu pareja por la noche y luego enfadarte por nada? Puedes estar experimentando cambios de humor. ⇒ ¿Estás embarazada y lloras por todo? Te contamos por qué
El estrógeno y la progesterona, así como la hCG, aumentan muy rápidamente después de la implantación. Esto puede hacerte sentir "apagada" o más malhumorada de lo habitual. ⇒ Cambios de humor en el embarazo
Temperatura basal
Por lo general, la temperatura de una mujer es más baja antes de la ovulación, y luego aumenta, y luego vuelve a bajar antes de que comience el período. Si quedas embarazada, tu temperatura permanece elevada. ⇒ ¿Cómo se usa el método de la temperatura basal?
Simple, ¿verdad? Excepto que hay algo más.
Algunas mujeres parecen experimentar una caída de temperatura de un día alrededor del momento de la implantación. Esto es diferente a la caída de la temperatura, lo que significa que el período se acerca: en el caso de un período inminente, la temperatura se mantendría baja.
En el caso de la implantación, la temperatura cae durante un día y luego vuelve a subir. Se cree que esto podría deberse a un aumento en el estrógeno, pero no se entiende por completo.
En resumen
Intentar quedar embarazada puede resultar emocionante y estresante. Los días y meses del ciclo pueden parecer eternos cuando estás deseando tener un bebé, y es fácil notar cada pequeño cambio en tu cuerpo y preguntarte si eso significa que estás embarazada. Esto no es malo, el conocimiento es enriquecedor, y de hecho, es algo muy normal.
Algunas mujeres notan signos y síntomas de que ha ocurrido la implantación. Los signos pueden incluir sangrado leve, calambres, náuseas, hinchazón, dolor en los senos, dolores de cabeza, cambios de humor y posiblemente un cambio en la temperatura basal del cuerpo.
Pero, y aquí está la parte frustrante, muchos de estos signos son muy similares al Síndrome pre-menstrual SPM. Además, la mayoría de las mujeres no experimentan signos de implantación y, de hecho, están embarazadas.
La mejor manera de saber con certeza si estás embarazada es realizar una prueba de embarazo. (Ten en cuenta que incluso si tienes síntomas de implantación, se necesitan unos días para que se acumule suficiente hCG para dar positivo en una prueba).
La "espera de dos semanas", el tiempo entre la ovulación y el momento en que generalmente puedes obtener una prueba de embarazo positiva, puedes poner a prueba toda tu paciencia. Sigue prestando atención a tu cuerpo, encuentra algunas actividades que te gusten especialmente para distraerte durante la espera.
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