Después de un par de semanas bastante tranquilas y sin novedades, esta semana por fin ha vuelto a haber algo de "acción". Para el día 22 de Diciembre tenía prevista la ecografía de las 12 semanas que además era una de las pruebas que solicitaba mi ginecólogo para conocer unos datos necesarios para realizar el Triple screening, esta prueba que te hacen para saber si las medidas del pliegue nucal y del hueso nasal son correctas y descartar cierto tipo de enfermedades.
Esta vez pedí hora para bastante tarde para que mi marido pudiera asistir y claro, nuestra hija también asistió. La verdad es que el momento fue un poco "show", pero me gustó mucho que toda la familia pudieramos compartir esos minutos, y además, a nuestra hija le sirvió para entender un poco mejor la situación.
Durante la prueba, me realizaron una ecografía vaginal y otra abdominal, y fue en la primera en la que pudimos apreciar más claramente y con todo lujo de detalles las partes del cuerpecito de nuestro bebé, que mide ya 5,3 cm y del cual pudimos observar claramente la columna vertebral (brillaba como las luces de un arbol de navidad), las piernas, los brazos e incluso los huesos de los dedos de las manos. Increible que en cinco centímetros se puedan apreciar ya tantos detalles. Eso sí, a nuestra hija parecia que lo que más gracia le hacía era localizar el culito del bebé.
Nos confirmaron que las medidas del pliegue nucal y del hueso nasal eran correctas y pasaron entonces a hacerme una ecografía abdominal para confirmar los datos desde otra perspectiva. En esta ecografía no se apreciaron los datos con tanta nitidez, al parecer mi utero está un poco hacia atrás y claro, las imágenes que el ecógrafo capta no son tan nítidas como con la ecografía vaginal, pero pudieron confirmar las cifras y que todo estaba correcto.
Acabamos escuchando el latido del corazón, muy fuerte y rápido y finalmente nos dijeron: Es muy pronto aún y cualquier cosa que les diga ahora puede luego cambiar o parecer otra, pero si quieren, y sabiendo que no es certero, les puedo decir lo que me parece que será el bebé... Ante eso, claro, surgió en nostros la intriga y le dijimos, adelante, que te parece que es, niño o niña... Y la respuesta fue... niño... Nuestra hija se lo tomó bastante mal en un primer momento... se fue de morros de la consulta y tuvimos que esforzarnos para convencerla de que no pasaba nada si finalmente su hermanito iba a ser niño. Menos mal que al día siguiente pareció algo más convecida de que daba igual el si era niño o niña, y que lo importante era que iba a tener un hermanito pequeño al que cuidar y enseñar.
Para completar los resultados de la prueba del Triple screening, al día siguiente tuve que hacerme un análisis, que junto con las medidas extraídas en la ecografía, darán un porcentaje final de posibilidades de que el bebé pueda tener enfermedades tales como síndrome de down. Hasta el día 28, en el que tendré consulta con mi ginecólogo no sabré los resultados, pero confío en que todo vaya de maravilla.
Mientras tanto, parece que no tengo tanta nauseas ya, y me encuentro bastante bien, eso sí, el sueño no me abandona, cada día voy teniendo un poquito más, y además ahora añadimos el cansancio de tanto preparativo de comidas y cenas navideñas... Espero no engordarme mucho estos días, y seguir con el peso adecuado al finalizar las 12 semanas de embarazo.
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