Montar a caballo durante el embarazo: ¿Es seguro? 🐎

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¿Puedo montar a caballo si estoy embarazada? ¿Es seguro?

Montar a caballo es una experiencia en sí misma. A algunos les da miedo, mientras que otros no se cansan de hacerlo y la hípica o equitación forma parte de su vida. Incluso puede que te preguntes si una mujer embarazada puede montar a caballo y desplazarse. No hay duda de que una mujer embarazada puede montar a caballo, pero la verdadera pregunta es si es seguro para ella. Y la respuesta es un rotundo NO, no es seguro montar a caballo durante el embarazo.

El embarazo hace que los ligamentos y los tendones se ablanden y, como consecuencia, pierdan su fuerza y estabilidad normales. A medida que avanza el embarazo, las futuras madres pueden perder el sentido del equilibrio, la buena mecánica corporal y el centro de gravedad, además de aumentar considerablemente de peso.

Cuando el centro de gravedad cambia, la capacidad de montar a caballo con seguridad disminuye considerablemente, lo que aumenta el riesgo de caídas, abortos y fracturas de huesos. Seguir montando a caballo durante el embarazo es una decisión difícil y personal que sólo pueden tomar la futura madre y su ginecólogo.

Algunos médicos recomiendan no montar nunca a caballo durante el embarazo, mientras que otros sugieren que está bien, pero sólo si la futura madre ha montado a caballo con regularidad antes de quedarse embarazada. La mayoría de los ginecólogos aconsejan montar a caballo hasta las 12 semanas y luego dejar de hacerlo. Porque a las 12 semanas el feto se ha reposicionado por encima de la cintura pélvica. El feto ya no está protegido por la estructura ósea de la pelvis y ahora es vulnerable, protegido sólo por la piel y los músculos. Si una amazona embarazada recibe una patada o es arrojada del caballo en este momento del embarazo, el feto corre un alto riesgo de sufrir lesiones graves.

Las mujeres con algún antecedente de pérdida de embarazo antes de las 24 semanas o que estén experimentando una condición de alto riesgo NO deben montar o trabajar cerca de los caballos. Además, el desprendimiento de la placenta, una grave complicación del embarazo en la que la placenta se separa del útero, también es posible debido a los empujones que se producen al montar.

Riesgos de montar a caballo estando embarazada 🐎🤰🏻

Aunque montar a caballo puede hacerte sentir bien o incluso ser calmante y placentero, no está exento de exponerte a ti misma y a tu embarazo a algunos riesgos importantes.

El constante movimiento de rebote

Tanto si tu caballo trota como si camina lentamente, el movimiento es continuamente hacia arriba y hacia abajo durante todo el tiempo. Además, este movimiento no es suave y suele ser brusco. Si el rebote es demasiado extremo, la posición de tu bebé podría cambiar repentinamente y causarle también lesiones internas.

La sensación de incomodidad

Aunque la silla de montar sea muy suave y cómoda, la experiencia de montar a caballo no es tan perfecta como parece desde el punto de vista de una tercera persona. Los jinetes que han montado a caballo durante un buen periodo de su vida, siguen quejándose de una sensación de incomodidad e incluso de náuseas. Con el embarazo poniendo a tu cuerpo en una montaña rusa ya, un incómodo paseo a caballo no debería ser otro añadido a los problemas.

El riesgo de caerse del caballo estando embarazada

Hay una gran diferencia entre un caballo y cualquier otro vehículo. Ningún vehículo puede empujarte de su lomo o darte una patada. Aquí hay posibilidades de que pierdas el equilibrio o de que el caballo intente tirarte de su lomo. Una caída durante tu embarazo puede ser fatal para el niño, e incluso para ti misma.

Señales de advertencia para dejar de montar a caballo durante el embarazo

En caso de que decidas montar a caballo con cuidado (y aprobación médica) cuando estés embarazada, definitivamente debes estar atenta a algunas señales de advertencia que podrían indicar que tu embarazo está en riesgo. Cualquier signo de estos síntomas debe ser puesto en conocimiento del médico inmediatamente:

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Hinchazón en la pantorrilla o dolor intenso.
Debilidad de los músculos en diferentes regiones del cuerpo.
Dolor de cabeza constante e intenso.
Sensación de falta de aire antes de realizar cualquier ejercicio.
Reducción de la frecuencia de los movimientos del niño.
Dolor en la región de la cintura pélvica.
Dolor en varias zonas del abdomen.
Tendencia a experimentar una fatiga extrema.
Signos de sangrado de la vagina.
Fugas o borbotones de líquido amniótico.
Inicio de las contracciones del útero, lo que significa un parto prematuro.
Sensación de mareo o desmayo total.
Palpitaciones seguidas de dolor en el pecho.
Falta de aire que dificulta la respiración.

Es obligatorio no montar a caballo al principio del embarazo, ya que es el momento en que el embrión está haciendo de su útero su hogar. Aun así, hay que evitar en la medida de lo posible montar a caballo al final del embarazo.

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Detalles: Escrito por: Estefanía Morera; Categoría: Salud y Cuidados durante el embarazo; Última actualización: 25 Agosto 2022