Amamantar a gemelos puede parecer una tarea imposible, pero es una misión posible. La experiencia puede ser incluso agradable y gratificante. Así que es una opción a tener en cuenta, sobre todo porque amamantar a gemelos tiene muchos beneficios para la salud y el desarrollo de los bebés, así como para la madre.
¿Cómo amamantar a gemelos o mellizos?
Es aconsejable dar el pecho lo antes posible después del parto para que el cuerpo entienda rápidamente que hay dos bebés que alimentar. Si no es posible alimentar a tus gemelos a las pocas horas del parto (por ejemplo, porque son prematuros y necesitan asistencia respiratoria), extráete la leche, idealmente cada dos o tres horas. Un profesional de la salud (por ejemplo, una enfermera, una matrona o un asesor de lactancia) puede mostrarte cómo hacerlo.
La producción de leche se basa en la ley de la oferta y la demanda: cuanto más se estimulen los pechos, más leche producirán. Amamantar a dos bebés significa que hay suficiente leche para dos.
El apoyo es importante. Tan pronto como sepas que vas a tener gemelos, debes buscar apoyo no sólo en la pareja, también en familiares y amigos que pueden ser una fuente valiosa de ayuda.
La leche materna es el mejor alimento que se le puede ofrecer a un bebé y es particularmente importante para los gemelos, que podrían ser más pequeños que otros bebés.
Comenzar a amamantar gemelos podría ser un desafío si no estás bien o estás agotada después del parto. Los gemelos recién nacidos generalmente necesitan alimentaciones pequeñas y frecuentes, porque no pueden permanecer al pecho durante un período prolongado.
Si tus bebés son prematuros y pequeños, es posible que tengan una succión débil e ineficaz. Esto podría causar un retraso en la producción de leche materna.
Es tentador asignar un pecho a cada bebé, pero es mejor no hacerlo. Los bebés crecerán y se desarrollarán mejor si se alimentan de ambos lados. Cambia en cada toma para ayudar a equilibrar la producción de leche, especialmente si un bebé tiene una succión mucho más fuerte que el otro.
Es posible alimentar con lactancia materna exclusiva a dos hermanos gemelos. En este caso el estímulo de la succión será doble y, por tanto, habrá doble producción de leche. Siempre que puedas, trata de amamantarles a la vez y recuerda: alterna el pecho que ofreces a cada bebé en las tomas sucesivas.
Amamantar a gemelos: ¿cada uno por su lado o al mismo tiempo?
Algunas madres prefieren amamantar a sus gemelos por separado para poder pasar un tiempo especial con cada bebé. Otras optan por amamantar a sus bebés al mismo tiempo (en tándem) para ahorrar tiempo. Date la oportunidad de probar ambas opciones para ver cuál te funciona mejor.
Por supuesto, se recomienda amamantar a los gemelos a demanda cuando muestren signos de hambre. Sin embargo, puedes decidir poner a los dos bebés al pecho al mismo tiempo en cuanto uno de los gemelos tenga hambre, para poder amamantarlos simultáneamente y ahorrar tiempo.
Sin embargo, la alimentación en tándem puede ser más difícil en los primeros días, ya que los recién nacidos aprenden a mamar. A menudo hay que comprobar y ajustar su cierre. Por eso, al principio te resultará más fácil dar el pecho a un bebé cada vez, para tener las manos libres y poder ajustar su posición y su enganche. Puedes probar la lactancia en tándem una vez que tus bebés estén más acostumbrados a alimentarse.
Posiciones para alimentar a tus gemelos en el pecho
Si decides dar el pecho en tándem, probablemente necesitarás la ayuda de tu pareja o de alguien cercano para acomodar a los bebés al principio. Con el tiempo, encontrarás la manera de que se instalen. Las almohadas o un cojín de lactancia pueden ayudar. Estas son las posiciones de amamantamiento utilizadas para la lactancia simultánea de gemelos:
Hay muchas maneras de ubicar a los gemelos, según su edad. Elije la posición que mejor funcione para ti y los bebés.
Para estos casos te recomendamos algunas posiciones:
- Posición lateral: estando tú sentada o tumbada, sitúa una almohada o cojín sobre tu regazo y colócales sobre la almohada mirándote a ti. Tómalos uno con cada brazo como si llevaras dos balones de rugby.
- Posición cruzada: es la misma situación que la anterior; pero poniendo a ambos a lo largo de la almohada (o sobre tu regazo) mirando un bebé hacia un pecho y el otro hacia el otro pecho, de manera que los cuerpos de ambos se cruzan.
- Posición mixta: combina las dos posturas anteriores. Colócate a un bebé en la posición de “balón de rugby” y a la otra criatura sobre tu regazo o sobre una almohada o cojín.
Puede ser útil una almohada o cojín de de lactancia gemelar o en tándem, que crean una superficie de apoyo y hacen que sea mucho más fácil sujetar a los bebés al pecho. ⇓⇓⇓
¿Es necesario cambiar a los bebés en cada toma?
La producción de leche puede variar de un pecho a otro porque los gemelos no se alimentan necesariamente de la misma manera. Por eso es mejor cambiar a los bebés en cada toma o cada día. Esto permite que cada bebé reciba la máxima cantidad de leche en cada toma, en caso de que los pechos no produzcan por igual. Además, estimula ambos pechos por igual, aunque un gemelo mame con menos vigor que el otro.
En las primeras semanas, es una buena idea llevar un registro de los tiempos de alimentación (qué bebé bebió de qué pecho y a qué hora) para saber a qué atenerse. Estos datos también pueden ser útiles, si surgen dificultades en la lactancia, para ayudar a un asesor de lactancia o a un entrenador de lactancia a identificar el problema y sugerir soluciones.
¿Qué hacer si un gemelo no se alimenta tan bien como el otro?
La lactancia en tándem puede ser una buena opción cuando uno de los bebés mama peor, ya que favorece el reflejo de eyección. El bebé que mama menos tendrá un extra de leche materna en su boca, lo que puede motivarle a mamar. Cambiar al bebé de un pecho a otro durante una toma, por ejemplo después de eructar, también puede ayudar. De este modo, el pecho menos estimulado por el bebé que tiene más dificultades para mamar puede ser estimulado por el otro gemelo.
Otra solución es amamantar solo al bebé que mama peor. Con un solo bebé en brazos, puedes concentrarte en cómo se agarra. Puedes comprobar si tu bebé abre bien la boca, si su boca cubre gran parte de la areola y si traga leche. Corregir el enganche del bebé puede ayudarle a mamar mejor. Un cambio en la posición de amamantamiento también puede ayudar.
La importancia de contar con ayuda
Tener gemelos requiere un periodo de adaptación. En los primeros días, la lactancia y otras tareas de cuidado del bebé te mantendrán muy ocupada. Puede ser muy útil pedir ayuda a las personas de tu entorno (pareja, padres, hermanas, hermanos, amigos) para diferentes tareas.
Sin embargo, si en los primeros días tras el nacimiento de los gemelos, en el hospital y al volver a casa, sientes la necesidad de estar sola para conocer a tus bebés, no dudes en decírselo a tus seres queridos. Incluso puedes hacerles saber antes del parto que no quieres visitas durante la primera semana.
Por el contrario, es conveniente que uno o varios familiares le acompañen los primeros días para que aprenda poco a poco a cuidar de sus bebés. Lo mejor es discutir con tu pareja antes del parto la ayuda que quieres y compartirla con tu familia.
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