¿Por qué necesita su hijo participar en las tareas domésticas (y cómo motivarlo)?
Conseguir que su hijo ayude en las tareas domésticas puede parecer una hazaña hercúlea. La mayoría de las veces, este intento se enfrenta a la resistencia. De hecho, según estudios recientes, cada vez son menos los niños que participan.
Aunque existe la idea errónea de que los niños pequeños no pueden (o no deben) participar en estas tareas, varios investigadores han encontrado muchos beneficios asociados a su asignación, a partir de los 3 años de edad.
Los niños que hacen tareas domésticas son más independientes, más responsables, se beneficia su desarrollo cognitivo, social, académico y emocional, les ayuda a desarrollar habilidades importantes, ganan confianza y ayuda a los niños a sentirse útiles.
¿Cómo pueden ayudar los niños en casa?
Desgraciadamente, las tareas domésticas son inevitables, pero se pueden hacer más divertidas involucrando a los niños. Pero, si crees que tus hijos no querrán tener nada que ver con la limpieza y demás, aquí hay algunos consejos para motivarlos a compartir la carga.
Cómo asignar tareas domésticas a los niños
Las tareas domésticas definitivamente no son las actividades más interesantes para hacer en familia, pero los expertos en crianza de niños dicen que hacer que sus hijos formen parte de ellas les enseñará a ser responsables. Los expertos también opinan que todos tenemos un anhelo de ser necesitados y sentir que hemos hecho una contribución significativa, ya sea en el trabajo, el colegio o en casa. Asignar tareas específicas a tus hijos también saciará su papel como contribuyente.
Aquí está el plan de acción para abordar las tareas domésticas como familia:
Trazar las tareas
Comienza por hacer una lista de las tareas que deben hacerse y pide a tus hijos que escojan sus favoritas. Recuerda verificar la edad apropiada de las tareas elegidas. Con esta información, crea uno o dos gráficos que enumeren las tareas diarias y semanales, el programa y la persona responsable. No olvides ubicarla en un área que sea accesible para todos. Siempre puedes cambiar las tareas para hacer que el calendario sea más desafiante y emocionante.
Da instrucciones claras:
Tu hijo no sabrá automáticamente cómo hacerlo. Además, tu definición de "sala limpia" puede no ser la misma que la de ellos. Para evitar conflictos, tenga claro lo que quiere que haga su hijo. Si se trata de limpiar la estantería, enséñale exactamente lo que tiene que hacer. Si quieres que limpie su habitación, sé específico sobre lo que esperas (todos los libros en la estantería, toda la ropa en el armario, nada de zapatos y calcetines por ahí, etc.).
Si no hace lo que esperas que haga, céntrate en el futuro ("La próxima vez, me gustaría que...") hasta que haga su tarea como tú quieres.
Ayúdales a aprender las tareas
Trabaja en equipo y enseña pacientemente a los niños cómo deben hacerse las cosas. Podría ayudar que primero lo hicieras tú, luego dejar que lo hagan ellos mientras supervisas y finalmente permitirles que lo hagan solos. Esto motivará a los niños a aprender rápidamente y a desempeñarse bien.
No seas estricta/o con los plazos:
Concéntrate en hacer la tarea bien y no rápidamente o descuidadamente. No enfocarse en una fecha límite le quitará la presión a tu hijo, dándole más espacio para que se desempeñe bien. Es importante darles tiempo para que se acomoden a su nueva rutina.
Tener un sistema de recompensa:
Los beneficios monetarios por cada tarea completada siguen siendo un tema debatido y los expertos creen que no se debe enseñar a los niños que las tareas se realizan por dinero. Los niños pequeños pueden ser recompensados con cosas simples como una pegatina en la tabla de tareas o unos minutos extra de tiempo de juego en la noche. Sin embargo, las asignaciones podrían funcionar para niños mayores que entienden el valor del dinero y pueden tener más necesidades de dinero.
Asignar tareas apropiadas para cada edad
No subestimes las habilidades de tu hijo, porque los niños pequeños de hoy manejan la tecnología mejor que nosotros. Sin embargo, al introducirlos en las tareas domésticas, asegúrate de proporcionar tareas apropiadas para su edad, como las siguientes:
Edades 2-3:
- Apilar libros o juguetes que están desordenados.
- Poner la ropa en la cesta de la ropa sucia.
- Limpiar las cosas que derraman.
- Tirar los pañales a la basura
- Regar las plantas
¿Qué tareas domésticas debe hacer un niño de 3 a 4 años?
Todo lo anterior
- Guardar los juguetes
- Ayudar a poner y quitar la mesa
- Ayudar a limpiar pequeñas superficies con un paño húmedo
- Lavarse las manos solo
- Ayudar a guardar la comida
- Doblar la ropa (con ayuda)
- Elegir la ropa y vestirse
¿Qué tareas domésticas debe hacer un niño de 4 a 5 años?
Todo lo anterior
- Ayudar a colocar la compra.
- Regar las plantas.
- Limpiar la mesa.
- Hacer la cama con la mínima ayuda
- Ayudar en la cocina
- Cuidar de una mascota (alimentación/cepillado)
- Colgar la toalla después de la ducha
¿Qué tareas domésticas debe hacer un niño de 6 a 7 años?
Todo lo anterior
- Ayudar en la cocina.
- Ayudar a preparar la merienda para el colegio.
- Limpiar y ordenar su habitación
- Hacer la cama sin supervisión
- Responder al teléfono
- Guardar la ropa limpia
- Fregar el suelo
- Guardar los platos limpios
- Doblar la ropa
¿Qué tareas domésticas para niños de 8 a 9 años?
Todo lo anterior
- Preparar su propio desayuno y merienda.
- Vaciar la papelera
- Rastrillar las hojas del jardín
- Preparar comidas fáciles
¿Qué tipo de tareas puede hacer un niño de 9 a 12 años?
Todo lo anterior
- Entretener y acompañar a sus hermanos más pequeños.
- Recoger la mesa, fregar los platos, tirar la basura.
- Barrer, limpiar el polvo.
- Ayudar a lavar el coche.
- Cambio de sábanas
- Hacer los deberes solo
- Pasar la aspiradora
Recuerda que la capacidad de tu hijo para realizar una tarea también dependerá de su nivel de desarrollo. En general, cuanto más repita tu hijo una tarea concreta, más cómodo se sentirá al realizarla solo. Si tu hijo parece tener dificultades con una tarea concreta, ayúdale hasta que sea capaz de hacerla por sí mismo o modifica la tarea para adaptarla a sus capacidades.
Con una lista de tareas apropiadas para su edad y una tabla de tareas organizadas, está todo listo para seguir adelante y conquistar todas las tareas domésticas en familia.
Asegúrate de que tu hijo es consciente de las consecuencias
Ahora que has determinado las tareas domésticas de tus hijos según su edad, ¿Qué pasa si no las cumplen o hacen un mal trabajo? De nuevo, la negociación puede ser útil y facilitar la cooperación. Pídeles que encuentren las consecuencias de hacer un mal trabajo:
- ¿Hay que quitar algunos privilegios?
- ¿Deben rehacer la tarea?
¿Debes pagar a tu hijo para que haga las tareas domésticas?
Hay diferentes opiniones sobre este tema. Muchos creen que hacer las tareas es responsabilidad de todos los miembros de la familia y que, por tanto, no hay que pagarlas. En otras palabras, formar parte de una familia significa participar en las tareas domésticas de la familia. Aunque la decisión de pagar a los hijos por las tareas domésticas es en gran medida personal, hay que tener en cuenta algunas cosas:
- Los niños pequeños rara vez están motivados por el dinero.
- Pagar a tu hijo por tareas específicas por las que probablemente pagarías a otra persona puede ser una buena manera de enseñarle la relación entre el trabajo y el dinero.
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