Sofocos durante el embarazo: ¿Qué hacer con ellos? ¿A qué se debe esta sensación de asfixia durante el embarazo? ¿Se puede remediar?
Sofocos durante el embarazo: ¿en qué mes suele ocurrir?
Durante el embarazo, se produce un aumento del metabolismo debido a la subida de las hormonas que aumentan nuestro termostato corporal. Por lo tanto, desde el segundo trimestre hasta el final del embarazo, la mujer embarazada puede experimentar picos de calor en determinados momentos. Sin embargo, aunque estos sofocos pueden ser repentinos, sólo duran unos segundos. Se trata de una sensación de calor ascendente que suele ir acompañada de sudoración, pero esta condición cesa rápidamente. Sin embargo, todas las futuras madres son diferentes: algunas dicen tenerlas al principio del embarazo, otras en los últimos meses o a lo largo del mismo. Los sofocos también pueden producirse en mitad de la noche y, para otras, después de las comidas.
Sofocos durante el embarazo: ¿Qué hacer?
No existe un tratamiento específico para los sofocos, que son una consecuencia hormonal temporal del embarazo. Por otro lado, para limitar su aparición y reducir su frecuencia, algunos gestos sencillos como la práctica de ejercicios de respiración, la meditación o el yoga prenatal pueden ayudar.
- Intentar calmarse y tranquilizarse es la mejor manera de sentirse tranquila.
- Tomar una ducha fría también puede ayudarte a sentirte mejor al instante.
- Cuando haga calor, usa ropa suelta, de algodón o lino.
- También debes asegurarte de estar suficientemente hidratada y permanecer a la sombra cuando estés en el exterior.
Sofocos durante la noche: ¿cómo dormir mejor estando embarazada?
Para dormir bien, se aconseja ventilar el dormitorio en los momentos del día en los que el sol no brilla demasiado para mantenerlo lo más fresco posible. Cerrar las persianas y dormir con sábanas de algodón también contribuirá a un sueño sin picos de calor.
¿Y si los mareos acompañan a estos sofocos?
En caso de que los sofocos vayan acompañados de mareos y/o molestias, es importante que hables con tu médico. En primer lugar, se asegurará de que no padezcas diabetes gestacional (un desequilibrio de la glucemia que puede aparecer al principio del embarazo), que es lo que provoca estos síntomas. Se detecta mediante una prueba de glucemia en ayunas al principio del embarazo y, en caso de riesgo (primer bebé macrosómico, sobrepeso, etc.), se realiza otra prueba durante la semana 22 de embarazo.
Además, para evitar las bajadas de tensión que pueden provocar sofocos, mareos o incluso malestar, se recomienda repartir las comidas. La idea es reducir la cantidad de comidas y añadir aperitivos. Por otro lado, recuerda, limitar el consumo de azúcares rápidos y evitar las bebidas azucaradas limita los riesgos de hipoglucemia. Una dieta que también limitará el aumento de peso significativo. Sin embargo, esto también puede dar lugar a estas sensaciones, ya que tu cuerpo no ha tenido tiempo de adaptarse a su nuevo peso.
Por último, si ya tiene una tendencia natural a los sofocos y los mareos, ésta puede aumentar durante el embarazo. En cualquier caso, no dudes en contarle a tu médico o matrona tus dolencias en cada consulta prenatal para que pueda asegurarse de que tu embarazo va bien y darte los consejos adecuados.
🔅 También te puede interesar leer:
- Alimentos que se deben evitar cuando se está Embarazada
- Belleza en el embarazo, riesgos que debes evitar
- Controles Médicos durante el Embarazo
- El embarazo semana a semana
- Recomendaciones para Aliviar las Molestias en el Embarazo
- La anemia durante el embarazo, ¿es grave?
- ¿Por qué Nunca se debe ignorar el picor durante el embarazo?
- Cómo afecta el embarazo a la salud mental y estado anímico
- Embarazo y salud dental. Lo que necesitas saber
- Problemas de sangrado durante el embarazo
- ¿Estar embarazada cambia la forma en la que se sueña?
- ¿Qué pasa si tienes fiebre y estás embarazada?
- ¿Qué pasa si tienes infección de orina en el embarazo?
***El contenido de este sitio web es solo para fines informativos, es de carácter general y no está destinado a diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad, y no constituye asesoramiento profesional. La información en este sitio web no debe considerarse completa y no cubre todas las enfermedades, dolencias, condiciones físicas o su tratamiento. Debe consultar con su médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, pérdida de peso o atención médica y / o cualquiera de los tratamientos de belleza.