¿Por qué lloran los bebés y cómo calmarlos?
Los bebés lloran, porque ese es su principal medio de comunicarse con sus cuidadores. Aunque algunos se irritan más que otros, todos los bebés lloran. Debido a que los bebés no pueden hablar, es fácil que las personas pasen por alto sus necesidades y deseos.
Comprender por qué el niño está llorando y saber que necesita, al principio puede ser particularmente complicado para los padres, especialmente para los que son primerizos. Al nacer, el llanto es una señal de que un bebé está vivo y que puede respirar. En las horas, semanas, meses y años posteriores, el llanto puede deberse a muchas razones.
Razones por las cuales los bebés lloran
Lo primero que un padre o cuidador debe tratar de identificar cuando se enfrenta con un bebé que llora es la razón del llanto del niño. Esto se vuelve más fácil cuanto más tiempo se pase con él o con la experiencia de haber criado a otros bebés. Las razones por las cuales los bebés lloran pueden ser muchas, pero hay algunas comunes.
Encabezando la parte superior de la lista está el hambre. Cuanto más pequeño es un bebé, mayores son las posibilidades de que el motivo de su llanto sea la comida. En otras circunstancias, puede ser ansiedad por separación, enfermedad, somnolencia, sobreestimulación, gases, cólico del lactante o enfermedad.
Aliviar al bebé cuando llora
Aunque todos los bebés son únicos en sus propios aspectos, algunos consejos y trucos, con respecto a calmarlos cuando lloran, parecen ser universales. Lo primero y más importante que un padre o cuidador debe recordar es nunca sacudir a un bebé. Sacudir a un bebé puede causar lo que se llama síndrome del bebé sacudido. Sus consecuencias poder ser hemorragias retinianas, hematoma cerebral (contusión cerebral), inflamación, presión y sangrado dentro del cerebro. Estos bebés pueden llegar a morir o sufrir déficits neurológicos a largo plazo, como pérdida de audición, ceguera, parálisis, convulsiones y retraso en el desarrollo mental. Este síndrome se puede prevenir completamente simplemente absteniéndose de sacudir a un bebé.
Si un padre puede identificar la razón por la cual un bebé está llorando, entonces el problema se resuelve inmediatamente. Un niño hambriento dejará de llorar cuando le den un pecho o un biberón para mamar. Un bebé incómodo será feliz si se elimina la causa de su incomodidad, como cambiarle un pañal mojado o sucio o el ajuste de la temperatura en la habitación del bebé. Un bebé que está bien alimentado y cómodo sin ningún signo de enfermedad puede simplemente querer algo de atención.
Algunos consejos para calmar a un bebé que parece estar llorando sin ninguna razón incluyen envolver al niño en una manta o fular para crear una sensación de seguridad. Además de esto, balancear rítmicamente al bebé, sostener al niño sobre su estómago y mecerlo puede crear un efecto calmante. Cantar a un niño también puede ayudar a calmarlo. Los baños calientes pueden ser efectivos en algunos bebés, pero en otros puede agitarlos más.
Cólicos del lactante
Aunque no se conoce bien la causa por la que aparecen, el término cólico se usa cuando el bebé no para de llorar durante 3 horas o más a diario durante varios días o semanas y en general el niño está saludable. Algunos estudios indican que la causa puede estar relacionada con problemas intestinales, como alergias a los alimentos, gases o reflujo.
Estos bebés tienen un llanto más agudo y a menudo lucen como si tuviesen dolor poniendo el estómago y el cuerpo rígido, y dejando las extremidades flexionadas. El cólico tiende a desaparecer por sí solo después de un tiempo.
Si quieres leer más información sobre los cólicos, puedes hacerlo aquí: Los Cólicos del lactante en el primer trimestre
Hacer frente al bebé cuando llora
Es muy normal que muchos padres, especialmente aquellos que son nuevos en la paternidad, se preocupen al no poder entender el llanto de su hijo. Además, incluso puede ser frustrante a veces. Es necesario recordar que el llanto es parte del bebé y su única forma de comunicarse hasta que aprenda a hablar.
Los padres deben tomarse un tiempo para conocer y entender más a sus bebés y siempre buscar el apoyo de familiares y amigos cercanos cuando se sientan abrumados. Si sienten que algo anda mal con el bebé, entonces se recomienda consultar con el pediatra.
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