Cuidado prenatal
La atención del embarazo consiste en atención médica prenatal (antes del nacimiento) y posparto (después del nacimiento).
Involucra controles, tratamientos y preparación para asegurar un embarazo, trabajo de parto y parto saludables para la madre y el bebé.
La atención prenatal ayuda a disminuir los riesgos durante el embarazo y aumenta las posibilidades de un parto seguro y saludable. Las visitas prenatales regulares pueden ayudar al médico a controlar el embarazo e identificar cualquier problema o complicación antes de que se agraven.
Los bebés nacidos de madres que carecen de atención prenatal tienen el triple de posibilidades de nacer con bajo peso. Los recién nacidos que nacen con bajo peso tienen cinco veces más probabilidades de morir que aquellos cuyas madres recibieron atención prenatal.
La atención prenatal debería comenzar al menos tres meses antes de que intentes concebir. Algunos hábitos saludables a seguir durante este período incluyen:
- Dejar de fumar y beber alcohol.
- Tomar suplementos de ácido fólico diariamente (400 a 800 microgramos).
- Hablar con el médico acerca de tus afecciones médicas, suplementos dietéticos y cualquier medicamento de venta libre o recetado que tomes.
- Evitar todo contacto con sustancias tóxicas y productos químicos en el hogar o el trabajo que puedan ser dañinos.
Controles Durante el embarazo
Una vez que quedes embarazada, deberás programar citas regulares de atención médica en cada etapa del embarazo.
Un horario de visitas puede implicar ver a tu médico o matrona:
- Cada mes en los primeros seis meses que estás embarazada.
- Cada dos semanas en el séptimo y octavo mes de embrazo.
- Todas las semanas durante el noveno mes de embarazo.
Durante estas visitas, el médico verificará tu salud y la salud de tu bebé.
Prepara la llegada de tu bebé ⬇⬇⬇
Las visitas pueden incluir:
- Tomar exámenes de rutina y exámenes de detección, como un análisis de sangre para detectar anemia, VIH y el tipo de sangre.
- Controlar tu presión arterial.
- Comprobar el aumento de peso.
- Monitorear el crecimiento y la frecuencia cardíaca del bebé.
- Hablar de dieta especial y ejercicio.
Las visitas posteriores también pueden incluir verificar la posición del bebé y observar cambios en el cuerpo mientras te preparas para el parto.
Se te ofrecerá participar en las clases de preparación al parto. En las que se tratan temas como:
- Prepararse para el nacimiento.
- Enseñar habilidades básicas para cuidar al bebé.
Si el embarazo se considera de alto riesgo debido a la edad o condiciones de salud, es posible que necesites visitas más frecuentes y atención especial. También es posible que necesites ver a un médico que trabaje con embarazos de alto riesgo.
Controles y Cuidados posparto
Si bien la mayor atención del embarazo se centra en los nueve meses de gestación, la atención posparto también es importante. El período posparto dura de seis a ocho semanas, comenzando justo después del nacimiento del bebé.
Durante este período, la madre pasa por muchos cambios físicos y emocionales mientras aprende a cuidar a su recién nacido. La atención posparto implica un descanso adecuado, nutrición y atención vaginal.
Descansar lo suficiente
El descanso es crucial para las nuevas madres que necesitan reconstruir sus fuerzas. Para evitar cansarse demasiado, es posible que deba:
- Dormir cuando el bebé duerme.
- Hacer colecho o mantener su cama cerca de la cuna de su bebé para facilitar la alimentación nocturna.
Comer correctamente
Seguir una alimentación adecuada en el período posparto es crucial debido a los cambios que sufre el cuerpo durante el embarazo y el parto.
El peso que ganaste durante el embarazo ayuda a que tengas suficiente nutrientes para amamantar. Sin embargo, debes continuar con una dieta saludable después del parto.
Los expertos recomiendan que las madres que amamantan coman cuando tienen hambre. Haz un esfuerzo especial para concentrarse en comer cuando realmente tienes hambre.
- Evita los refrigerios ricos en grasas no saludables.
- Come alimentos ricos en grasas saludables que equilibren proteínas, carbohidratos y frutas y verduras.
- Beber mucho líquido.
Cuidado vaginal
Las nuevas madres deben hacer del cuidado vaginal una parte esencial de su cuidado posparto. Puedes experimentar:
- Dolor vaginal si tuviste una rotura durante el parto.
- Problemas para orinar, como dolor o una necesidad frecuente de orinar.
- Secreción, incluidos pequeños coágulos de sangre.
- Contracciones durante los primeros días después del parto.
Programa un chequeo con tu médico aproximadamente seis semanas después del parto para analizar los síntomas y recibir el tratamiento adecuado. Debes abstenerse de tener relaciones íntimas durante cinco a seis semanas después del parto para que la vagina tenga el tiempo adecuado para sanar.
Recuerda
Es importante mantenerse lo más saludable posible durante el embarazo y durante el período posparto. Controla todas tus citas de atención médica y sigue las instrucciones del médico para la salud y seguridad tuya y de tu bebé.
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