La relación de apego
Marcada por la situación edípica, lo que implica que la relación del niño con la madre pasa de ser dual (niño-madre) a ser triangular (niño-madre-padre). Entre los 3 y 5 años, tanto el niño como la niña, comienzan a percibir que sus padres mantienen una relación afectiva, en la cual ellos están excluidos.
Lo que Freud denominó Complejo de Edipo, hace referencia a los deseos amorosos de la niña hacia el padre y del niño hacia la madre, y los sentimientos hostiles hacia el padre del mismo sexo, convirtiendose en un rival.
Gracias a esta relación con sus padres, el niño asume su propia identidad sexual.
La organización de la personalidad
Aparecen las identificaciones secundarias con los padres y la conciencia moral, adquisición muy valiosa, ya que permite al niño acomodarse a las exigencias del ambiente social. El niño adquiere mayor control, asume e interioriza las normas paternas. La culpabilidad aparece cuando se transgreden las prohibiciones.
Fuente ECCA