Cuando se utilizan correctamente, los aceites esenciales pueden ser seguros y ofrecer varios beneficios a los bebés. Sin embargo, es mejor utilizar aceites comestibles de origen vegetal, como el aceite de almendras dulces, el aceite de coco sin perfume y el aceite de sésamo, sin ningún olor en la delicada piel del bebé. Esto se debe a que los bebés suelen acabar lamiendo o chupando sus partes del cuerpo. Además, cualquier tipo de olor puede sobreestimular los sentidos y el sistema nervioso del bebé.
Si está pensando en utilizar aceites esenciales para bebés, es conveniente que consultes a un médico o a un profesional de los aceites esenciales.
¿Cuál es la edad adecuada para utilizar aceites esenciales para bebés?
Los bebés pequeños tienen una piel fina y permeable que es sensible a los aceites esenciales. Por lo tanto, no es aconsejable utilizar aceites esenciales para bebés menores de tres meses. Cuando se trata de bebés mayores de tres meses, el tipo de aceite esencial y el uso previsto determinan la edad adecuada para su uso. Consulta a un experto en aceites esenciales para saber si un aceite esencial específico es adecuado para la edad de tu bebé.
¿Qué aceites esenciales no son seguros para los bebés?
El uso tópico o la difusión de los AE de abedul (dulce) y gaulteria no se recomienda para los bebés y los niños de todas las edades. Asimismo, se desaconseja el uso del aceite esencial de hisopo (en masaje o difusión) en niños menores de dos años y del aceite de eucalipto en niños menores de diez años.
Algunos AE son ricos en aldehídos y fenoles, que pueden provocar reacciones cutáneas. Los aceites esenciales de canela (corteza y hoja), hierba de limón, comino, citronela, laurel, brote de clavo, orégano y tomillo son irritantes dérmicos bien conocidos que se debe evitar utilizar en los bebés.
¿Cómo utilizar los aceites esenciales para los bebés?
Puede utilizar el aceite esencial para su bebé a través de los siguientes métodos.
- Aplicación tópica: Es imprescindible mezclar un aceite esencial con un aceite portador, una crema sin perfume o una loción antes de su uso tópico . El aceite de almendras dulces prensado en frío, el aceite de sésamo, el aceite de jojoba y el aceite de coco son algunos de los aceites naturales que se pueden utilizar con seguridad como aceites portadores para los bebés. Evita utilizar aceite de oliva o de girasol, ya que pueden dañar la barrera cutánea de algunos bebés. Lo mejor es hacer una pequeña prueba de parche para comprobar si hay una reacción alérgica antes de utilizar cualquier aceite.
- Difusión: La difusión de aceites esenciales con un vaporizador o un difusor permite al bebé inhalar los aceites esenciales. Como los tipos de difusores varían, comprueba las directrices sobre el uso de la mezcla de aceites esenciales en un difusor antes de utilizarlo. Hay que diluir correctamente los AE antes de la difusión para reducir el riesgo de efectos respiratorios adversos. No se aconseja la inhalación de vapores en niños menores de siete años.
- Pulverizaciones: Puedes preparar un spray de aromaterapia mezclando el aceite esencial con agua destilada y solubol. El solubol, también conocido como dispersante, es un tipo de emulsionante que mantiene el AE diluido en el agua. Puedes rociar el aceite esencial diluido en las cortinas y alfombras de la habitación del bebé y sus alrededores. Sin embargo, evita rociar aceites esenciales en las almohadas para evitar su ingestión accidental.
Puede considerar cualquiera de los métodos anteriores, dependiendo del tipo de aceite esencial y del propósito de uso. Evita el uso oral de los AE en los bebés, ya que pueden ser tóxicos.
¿Qué aceites esenciales son seguros para los bebés?
Estos son algunos de los aceites esenciales que puedes usar para tu bebé después de consultar con el médico.
- El aceite de lavanda tiene un efecto calmante sobre el cuerpo y la mente. Puedes aplicarlo en bebés mayores de tres meses para reducir el dolor, aliviar los síntomas de los cólicos y favorecer el sueño. El masaje y la difusión son dos formas de utilizar el aceite de lavanda para bebés.
- El aceite esencial de eneldo es rico en compuestos bioactivos, como carvona, limoneno y fenoles. El aceite tiene propiedades carminativas (reduce los gases) y antiespasmódicas (reduce los espasmos musculares), lo que puede ayudar a aliviar los síntomas de los cólicos en los bebés. Puedes utilizar el aceite de eneldo para dar un masaje a tu bebé por la mañana o por la noche.
- Masajear a los bebés con aceite de manzanilla puede aumentar la duración de su sueño y reducir los síntomas de los cólicos. El aceite esencial de manzanilla romana también puede ser eficaz contra los forúnculos, las quemaduras solares, la dermatitis del pañal y el herpes labial
- El aceite de mandarina tiene una fragancia dulce que resulta agradablemente calmante. Suele ser seguro para los bebés mayores de seis meses. Masajear al bebé con aceite de mandarina a la hora de acostarse puede ayudarle a dormir plácidamente. Además, tiene propiedades antibacterianas y antifúngicas que pueden mantener la piel sana.
- El AE de sándalo es un ingrediente común en varias medicinas alternativas, perfumes y cosméticos. El aceite esencial tiene un efecto calmante que ayuda a reducir la ansiedad y el insomnio. Además, tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y antibacterianas que pueden mantener la piel del bebé sana.
- El aceite del árbol del té tiene propiedades antimicrobianas, antifúngicas y antioxidantes. Su uso tópico podría aliviar abscesos, herpes labiales, quemaduras, picaduras de insectos y caspa, y su inhalación por difusión puede aliviar problemas respiratorios, como la tos. El aceite de árbol de té diluido es seguro para los bebés mayores de seis meses.
- El aceite esencial de bergamota es conocido por sus efectos antisépticos y antiinflamatorios. En aromaterapia, se considera útil para reducir la ansiedad y el estrés. El uso tópico y la difusión del aceite de bergamota son generalmente seguros para los bebés mayores de seis meses.
- La difusión del aceite esencial de geranio relaja la mente y reduce la ansiedad. También tiene propiedades antibacterianas y antimicrobianas, que pueden ayudar a controlar el eczema, la dermatitis y la infección por hongos. Puedes utilizar el geranio para tu bebé cuando tenga más de seis meses.
Consulte a un pediatra antes de utilizar aceites esenciales para bebés, independientemente del modo de aplicación elegido.
Consejos de seguridad para el uso de aceites esenciales para bebés
- Consulta a un profesional en aceites esenciales antes de utilizar aceites esenciales para bebés.
- Utiliza los aceites esenciales con moderación, según la dosis recomendada. Un uso excesivo podría tener efectos adversos, como daños irreversibles en la piel.
- Ten en cuenta la proporción de dilución adecuada. La proporción varía según el tipo de aceite y su concentración. También puede variar según el aceite portador. No obstante, comprueba siempre la proporción de dilución recomendada en el envase del aceite.
- Haz una prueba de parche antes de utilizar el aceite esencial para bebés y niños pequeños. Si tu bebé tiene alergias o antecedentes familiares de alergias y sensibilidades, consulta a un pediatra antes de utilizarlo.
- Ten cuidado con la reactividad cruzada de los aceites esenciales. Por ejemplo, el aceite de eneldo puede provocar reacciones alérgicas en personas alérgicas a la familia de la zanahoria (zanahoria, asafétida, hinojo y apio).
- Mantente alerta ante posibles interacciones con medicamentos. Si tu bebé está tomando medicamentos o padece alguna enfermedad, utiliza los AE según las indicaciones de los expertos.
- Interrumpe inmediatamente el uso de AE si tu bebé o niño pequeño muestra signos de sensibilidad, como irritación.
- No apliques el aceite esencial sobre y alrededor de la piel dañada, ya que puede provocar reacciones cutáneas no deseadas.
- Evita aplicar el aceite esencial diluido o sin diluir alrededor de los ojos, la nariz y la boca para evitar su ingestión accidental.
- No expongas a tu bebé o niño pequeño al sol hasta 24 horas después de utilizar el aceite esencial para evitar el riesgo de quemaduras solares por fotosensibilidad.
- Evita el uso prolongado del mismo aceite esencial a menos que te lo indique el especialista.
- Difundir los AE en una zona bien ventilada para evitar la inhalación excesiva del aceite.
- No utilizar un AE en difusión durante mucho tiempo (una hora o más).
- Difúndelo sólo de 15 a 30 minutos. La exposición prolongada a los AE puede provocar náuseas y letargo.
- Evita el uso de difusores si el bebé tiene asma o tiene antecedentes familiares de esta enfermedad.
- Mantén los aceites esenciales fuera del alcance de los bebés, los niños y las mascotas.
- Hay que mantener la calidad de los aceites esenciales guardándolos en recipientes de cristal bien cerrados y oscuros, lejos del calor y la luz.
- Contacta inmediatamente con la unidad de intoxicaciones más cercana si un niño pequeño ingiere accidentalmente un aceite esencial.
- Lava el ojo con mucha agua fría si el aceite esencial entra accidentalmente en los ojos del bebé. Acuda a un pediatra o a un oftalmólogo.
- Evita calentar directamente los AE, ya que son muy inflamables. Mantenlos alejados de las velas y otras fuentes de calor, como los fogones.
Los aceites esenciales aportan diversos beneficios para la salud de los bebés cuando se utilizan tras consultar a un experto en salud. Aunque pueden administrarse a los bebés, los médicos no recomiendan los aceites esenciales para los menores de tres meses. Además, aunque tienen propiedades terapéuticas, no se aconseja utilizarlos como medicamentos para las dolencias. Consulta a un experto antes de utilizarlos, ya que la constitución química, la dosis y la duración de uso de cada AE varían. Además, asegúrate de comprar AE de alta calidad y de utilizarlos con moderación para evitar efectos adversos en la piel.
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