¿Qué es el mareo?
El mareo se siente como si pudiera desmayarse. Su cuerpo puede sentirse pesado mientras que su cabeza se siente como si no estuviera recibiendo suficiente sangre. Otra forma de describir el mareo es como una "sensación de tambaleo". El mareo puede estar acompañado de visión nublada y pérdida de equilibrio.
Si bien no siempre es motivo de preocupación, el aturdimiento a veces puede indicar una afección médica subyacente y puede aumentar el riesgo de sufrir una caída. Por esta razón, debe tener precaución cuando se sienta mareado.
El mareo a menudo ocurre cuando se mueve rápidamente de una posición sentada a una posición de pie. Este cambio de posición da como resultado una disminución del flujo sanguíneo al cerebro. Esto puede crear una caída en la presión arterial que hace sentir débil. Es más probable que experimente esta afección si está deshidratado debido a una enfermedad o una ingesta insuficiente de líquidos. La sensación puede mejorar al sentarse o acostarse.
El mareo o aturdimiento puede estar acompañado de náuseas y sensación de perder el equilibrio. A menudo es causado por problemas con el oído interno, el cerebro, el corazón o el uso de ciertos medicamentos. El mareo puede ser peligroso porque cambia su sentido del equilibrio y puede aumentar su probabilidad de caerse.
Un tipo de mareo, llamado vértigo, causa la falsa sensación de que todo a su alrededor se mueve o gira cuando en realidad está quieto. El vértigo puede hacer que sienta que está flotando, inclinándose, balanceándose o girando. La mayoría de los casos de vértigo son causados por trastornos del oído interno, que envían señales a su cerebro que no son consistentes con los signos que están recibiendo sus ojos y nervios sensoriales.
Causas del mareo
Además de la deshidratación y el cambio de posición, otras causas comunes incluyen:
- Alergias.
- Vértigo.
- Tener un resfriado.
- Tener gripe.
- Azúcar baja en sangre.
- Consumo de tabaco, alcohol o sustancias ilegales.
- Deshidratación causada por vómitos, diarrea, fiebre y otras enfermedades.
- Respiración muy profunda o rápida (hiperventilación).
- Ansiedad y estrés.
- Algunos medicamentos recetados y de venta libre.
En algunos casos, el mareo se debe a una afección más grave, que incluye:
- Afecciones cardíacas, como un ataque cardíaco o latidos cardíacos fuera de ritmo.
- Hemorragia interna (en sus órganos internos o sistemas de órganos).
- Caída significativa de la presión arterial.
- Ataque fulminante.
Cuando buscar ayuda médica
Busque atención médica inmediata si ha perdido una cantidad significativa de sangre y se siente mareado. Además, el aturdimiento acompañado de un ataque cardíaco o síntomas de accidente cerebrovascular debe tratarse de inmediato. Estos síntomas incluyen:
- Caída facial en un lado.
- Náuseas.
- Presión o dolor en el pecho.
- Falta de aliento.
- Sudoración inexplicable.
- Vómitos.
No intente conducir hasta el hospital si experimenta estos síntomas. En cambio, llame a una ambulancia.
Si su mareo o aturdimiento persiste después de aproximadamente una semana o ha resultado en una lesión o náuseas, consulte a su médico. También busque atención médica si empeora con el tiempo.
¿Cómo se trata el mareo?
El aturdimiento que no se debe a la pérdida severa de sangre, ataque cardíaco o accidente cerebrovascular a menudo desaparece con el tiempo. Otros tratamientos abordarán la afección subyacente.
El tratamiento para las causas menos graves de aturdimiento puede incluir:
- Tomar más agua.
- Recibir fluidos intravenosos (fluidos de hidratación administrados a través de una vena).
- Comer o beber algo azucarado.
- Beber líquidos que contengan electrolitos.
- Acostarse o sentarse para reducir la elevación de la cabeza con respecto al cuerpo.
Para los casos más graves o para mareo que no desaparece, el tratamiento puede incluir:
- Dieta baja en sal.
- Medicamentos contra las náuseas.
- Medicamentos contra la ansiedad.
- Medicamentos contra la migraña.
- Terapia de equilibrio, también conocida como rehabilitación vestibular (ejercicios para ayudar a que el sistema de equilibrio sea menos sensible al movimiento).
- Psicoterapia para reducir la ansiedad.
- Inyecciones de antibióticos en el oído interno que está causando problemas de equilibrio (esto desactiva el equilibrio en ese oído, permitiendo que el otro oído se haga cargo del equilibrio).
- Extirpación del órgano sensorial del oído interno, conocido como laberintectomía (una cirugía poco común para desactivar la función del oído interno que está causando problemas de equilibrio para que el otro oído pueda hacerse cargo)
¿Cómo puedo prevenir el mareo?
- Pararse lentamente y evitar cambios repentinos en la postura puede ayudar a prevenir el aturdimiento. Beba mucha agua, especialmente cuando esté enfermo o haciendo ejercicio intenso. Evite las luces brillantes y use gafas de sol cuando esté al aire libre.
- Evite las sustancias que causan aturdimiento, como el alcohol o el tabaco. Los antihistamínicos, los sedantes y los medicamentos contra las náuseas también pueden causar aturdimiento. No deje de tomar medicamentos recetados sin la recomendación de su médico.
- Si tiende a experimentar mareos de manera regular, aquí hay algunos consejos adicionales para ayudarlo a mejorar su calidad de vida:
- Tenga en cuenta que puede perder el equilibrio al caminar, lo que puede provocar una caída y lesiones graves.
- Muévase con cuidado y lentamente, utilizando un bastón para movilidad si es necesario.
- Evite las caídas en su hogar quitando cosas con las que pueda tropezarse, como alfombras y cables eléctricos; agregue alfombras antideslizantes al piso de su baño o ducha; asegúrese de que su hogar esté bien iluminado.
- Siéntese o recuéstese tan pronto como se sienta mareado; recuéstese con los ojos cerrados en una habitación oscura si experimenta un ataque de vértigo grave.
- No conduzca un vehículo ni opere maquinaria pesada si a menudo se marea repentinamente.
- Siga una dieta saludable rica y variada en nutrientes.
- Duerma lo suficiente (de 8 a 10 horas para adolescentes, de 7 a 9 horas para adultos jóvenes y adultos, y de 7 a 8 horas para adultos mayores).
- Evite el estrés adicional practicando técnicas de relajación como respiración profunda, yoga y meditación.
- Beba suficientes líquidos (al menos ocho vasos al día).
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