¿Qué es el hipo?
El hipo, son sonidos involuntarios producidos por espasmos del diafragma. El diafragma es una gran lámina de músculo colgada debajo de los pulmones que, junto con los músculos intercostales, nos hace respirar. El espasmo muscular de estos músculos succiona aire hacia los pulmones, y la rápida inhalación hace que una estructura dentro de la garganta (llamada epiglotis) se cierre de golpe. (La epiglotis es un colgajo de tejido que se cierra sobre la tráquea durante la deglución para evitar la inhalación de alimentos, líquidos o saliva). Este cierre brusco de la epiglotis causa el sonido característico del hipo.
Generalmente, el hipo se resuelve por sí solo después de unos minutos, pero el hipo prolongado que dura días o semanas puede ser un síntoma de los trastornos subyacentes. Ciertos medicamentos, incluidos los medicamentos para la epilepsia, pueden hacer que una persona sea más propensa al hipo.
Síntomas de hipo
Los síntomas del hipo incluyen:
- Una contracción aguda o espasmo del diafragma que se siente justo debajo del esternón.
- El aire es aspirado involuntariamente hacia la garganta.
- La epiglotis de cierre hace un sonido de "hipo".
- El hipo generalmente se detiene después de unos minutos.
Causa del hipo
La actividad muscular del diafragma es controlada por los nervios. El hipo ocurre cuando determinados estímulos activan los nervios para enviar espasmos al diafragma. No se sabe por qué ocurre esto.
Disparadores de hipo
La causa del hipo es a menudo desconocida y puede que no haya un desencadenante aparente. Se sabe que varios disparadores, en particular los que causan presión en el diafragma, provocan un ataque de hipo en algunas personas de vez en cuando. Algunos de estos desencadenantes incluyen:
- Comer muy rápido.
- Las comidas calientes o picantes.
- Indigestión.
- Consumo excesivo de alcohol.
- Bebidas gaseosas.
- Tabaquismo.
- Estrés.
- Malos olores.
- El embarazo.
Estrategias de autoayuda
El hipo es inofensivo y generalmente se resuelve solo en pocos minutos. Algunos "remedios" para quitar el hipo incluyen:
- Contener la respiración.
- Respirar profundamente.
- Respirar en una bolsa de papel.
- Comer un poco de jengibre fresco.
- Chupar un limón.
- Tomar una bebida de agua caliente y miel.
- Tomar una cucharada de azúcar.
- Beber un vaso de agua lentamente.
- Comer hielo.
- Hacer gárgaras.
- Sentarse o inclinarse sobre las rodillas
- Recibir un susto.
El hipo puede ser sintomático de una enfermedad
Los hipos que duran días, semanas o incluso años pueden ser síntomas de una enfermedad subyacente. Ciertos trastornos pulmonares o cerebrales a veces pueden interferir con el funcionamiento del diafragma y hacer que la persona sea propensa al hipo. El hipo también puede ser un efecto secundario de la cirugía o medicamentos particulares.
Algunas de las enfermedades, afecciones y medicamentos que pueden provocar ataques frecuentes o prolongados de hipo incluyen:
- Esofagitis (inflamación del esófago).
- Una glándula tiroides hiperactiva.
- Pleuritis (inflamación de la membrana que rodea los pulmones).
- Neumonía (inflamación de los pulmones).
- Enfermedad del riñón.
- Daño cerebral, como un accidente cerebrovascular o un tumor, que afecta el área del cerebro que controla el diafragma.
- Cirugía abdominal.
- Cirugía de pecho.
- Ciertos medicamentos para la epilepsia.
- Chicle de nicotina.
Tratamiento médico
Los hipos prolongados deben investigarse médicamente. Las opciones de tratamiento pueden incluir:
- Tratamiento para el trastorno subyacente.
- Cambios en las dosis actuales de los medicamentos.
- Cambiar a otra forma de terapia de nicotina
- Fármacos antiespasmódicos para calmar el diafragma.
- Un tubo insertado en la nariz (intubación nasogástrica).
- Un bloqueo nervioso.
- Cirugía, para cortar algunos de los nervios que atienden el diafragma.
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