Cáncer vaginal
El cáncer de vagina es uno de los cánceres ginecológicos más raros y representa alrededor del dos por ciento de los casos. Las mujeres mayores de 50 años son las más afectadas.
La vagina es parte del sistema reproductor femenino. Este canal muscular mide alrededor de 7,5 cm de largo y se extiende desde el cuello del útero (el cuello uterino) hasta los genitales externos (la vulva).
En general, el cáncer de vagina tiende a ser un cáncer secundario, lo que significa que las células cancerosas han migrado a la vagina desde otra parte del cuerpo, como el cuello uterino o la vulva. Alrededor del 95 por ciento de los cánceres que comienzan en la vagina son carcinomas de células escamosas, lo que significa que el cáncer se originó a partir de células de la piel.
Otro grupo de mujeres propensas a cánceres vaginales son las que fueron expuestas al medicamento dietilestilbestrol (DES) mientras estaban en el útero de su madre. Fue recetado a mujeres embarazadas entre 1938 y 1971 con la creencia errónea de que ayudó a prevenir el aborto espontáneo.
Síntomas del cáncer vaginal
Algunos cánceres vaginales no presentan síntomas en las primeras etapas, y solo causan síntomas una vez que han invadido otras partes del cuerpo. Pueden sospecharse después de una prueba de detección cervical anormal.
Algunos de los síntomas del cáncer vaginal incluyen:
- Sangrado vaginal indoloro que no está asociado con la menstruación.
- Sangrado después de las relaciones sexuales.
- Flujo vaginal maloliente.
- Dolor al orinar o al pasar los movimientos intestinales.
- Dolor pélvico constante.
Factores de riesgo para el cáncer vaginal
Los factores de riesgo para el cáncer vaginal incluyen:
- Edad avanzada: la mayoría de las mujeres con cáncer vaginal son mayores de 50 años.
- Antecedentes de cáncer ginecológico, como cáncer de cuello uterino o vulva.
- Tratamiento previo para la displasia (células anormales en el cuello uterino, la vagina y la vulva).
- Verrugas genitales (infección por virus del papiloma humano).
- Tabaquismo.
- Exposición prenatal a la hormona sintética DES que puede causar adenosis vaginal. (Esto no ha sido prescrito desde 1971).
- Adenosis vaginal, por lo que también se encuentran células en las paredes vaginales que deben limitarse al revestimiento interno del cuello uterino (endocervix).
- Algunas investigaciones sugieren que usar un pesario para tratar un útero prolapso puede, con el tiempo, irritar la vagina y potencialmente causar cambios en las células vaginales.
Cáncer vaginal relacionado con DES
Entre 1938 y 1971, la hormona sintética DES fue prescrita comúnmente para mujeres embarazadas con la creencia errónea de que ayudó a prevenir el aborto espontáneo. Ahora sabemos que la exposición al DES puede causar problemas de salud tanto para las mujeres que tomaron el medicamento como para sus hijos en el futuro.
El sistema reproductivo de una mujer puede cambiar después de su exposición a DES. Esto puede incluir la alteración de la forma del útero y el cuello uterino. Muchas hijas de DES tienen adenosis vaginal, que es un factor de riesgo para el cáncer de células claras (adenocarcinoma), el raro cáncer vaginal asociado con las hijas de DES.
A diferencia de otros casos de cáncer vaginal, las hijas de DES que desarrollan cáncer vaginal normalmente se diagnostican a una edad temprana, entre los 14 y los 33 años.
Propagación del cáncer vaginal
El cáncer vaginal, a medida que crece, generalmente se propaga localmente por primera vez en partes del cuerpo cercanas, como la vejiga y el intestino. En casos avanzados, se propaga a través de los sistemas linfático o sanguíneo a otros órganos, como los pulmones y el hígado.
Diagnóstico de cáncer vaginal
El cáncer de vagina se diagnostica mediante una serie de investigaciones, que incluyen:
- Historial médico.
- Examen físico, incluido un examen pélvico con un instrumento llamado colposcopio.
- Biopsia del tejido afectado, que puede ser necesario realizar bajo anestesia.
Tratamiento del cáncer vaginal
El tratamiento depende de una serie de factores diferentes que incluyen su salud general, el tamaño y la etapa del cáncer y si se ha diseminado a otras partes de su cuerpo.
Las opciones de tratamiento pueden incluir cirugía, si el cáncer es pequeño, y radioterapia o cirugía extensa después de la radioterapia cuando el cáncer es muy grande o ha recurrido:
- Cirugía: es posible que sea necesario extraer la vagina y los tejidos circundantes. Los cirujanos pueden crear una vagina artificial utilizando tejido de otras partes del cuerpo, como el muslo, para que pueda tener relaciones íntimas. También se puede necesitar una histerectomía radical (se extirpan el útero, el cuello uterino, los ovarios y las trompas de Falopio, junto con los ganglios linfáticos asociados y el extremo superior de la vagina). Si el cáncer se ha diseminado a otros órganos pélvicos, como la vejiga o el recto, se requerirá cirugía para extirpar los tejidos u órganos enfermos
- Radioterapia: es el uso de rayos X dirigidos con precisión para matar las células cancerosas.
- Radioterapia interna (braquiterapia): el material radioactivo se implanta quirúrgicamente en el tumor o en un lugar cercano.
Cuando no es posible una cura para el cáncer vaginal
Si el cáncer de vagina se diagnosticó en sus últimas etapas, es posible que el cáncer se haya propagado hasta el punto de que ya no sea posible una cura. Luego, el tratamiento se enfoca en mejorar la calidad de vida aliviando los síntomas. Esto se llama tratamiento paliativo.
**El contenido de este sitio web es solo para fines informativos, es de carácter general y no está destinado a diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad, y no constituye asesoramiento profesional. La información en este sitio web no debe considerarse completa y no cubre todas las enfermedades, dolencias, condiciones físicas o su tratamiento. Debe consultar con su médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, pérdida de peso o atención médica y / o cualquiera de los tratamientos de belleza.