Recursos educativos - Poesías para dedicar a un padrino
Esta poesía está dedicada a todos los padrinos, aquellos que desempeñan un papel importante en la vida de sus ahijados. Los padrinos son como una segunda familia, una figura de apoyo que está presente en los momentos importantes y que ofrece consejos y guía en el camino de la vida. Con esta poesía, quiero honrar y agradecer a todos los padrinos que han tenido un impacto positivo en las vidas de sus ahijados. Son un ejemplo de amor, compromiso y responsabilidad, y su presencia es una bendición que se agradece de por vida.
Mi padrino, mi guía y mi ejemplo a seguir
Querido padrino, con amor te escribo,
en estas líneas mi cariño te envío.
Eres un amigo, un guía, un confidente,
siempre estás a mi lado, nunca ausente.
Tus consejos me han guiado en la vida,
tus palabras sabias, nunca son vacías.
Tu presencia es un bálsamo en mi camino,
tu apoyo incondicional siempre es divino.
Eres mi modelo, mi ejemplo a seguir,
tus valores y virtudes son un gran sentir.
Tu sabiduría y tu fuerza interior,
me inspiran a ser mejor cada día, señor.
Por todo lo que eres, te doy gracias,
y en esta poesía mi corazón desbarrancas.
Eres mi padrino, mi padrino querido,
y mi respeto por ti es siempre sentido.
En conclusión, los padrinos son una figura valiosa en la vida de sus ahijados, que a menudo se convierten en mentores, amigos y guías. A través de esta poesía, quiero expresar mi gratitud a todos los padrinos, que han dejado una huella imborrable en la vida de sus ahijados. Su amor, sabiduría y apoyo son un regalo invaluable, y su presencia es una fuente de fortaleza y aliento en los momentos difíciles. Que esta poesía sea un tributo a su dedicación y amor, y que sirva para recordarles lo importantes que son en la vida de sus ahijados.