Este periodo de edad se corresponde con la etapa de educación infantil del actual sistema educativo y significa el comienzo de la escolarización para muchos.
En esta etapa los niños y niñas pasan parte de su tiempo jugando, donde adquieren habilidades, valores e ideas necesarias en su crecimiento.
Desarrollo físico
- Crecen más lentamente.
- Por lo general, a esta edad los niños deben tener el control de esfínteres dominado. (pis y caca).
- Aumenta su fuerza muscular y habilidades motoras. Corren, suben y bajan escaleras...
Desarrollo Psicosocial
- En este periodo el niño consigue desarrollar su lenguaje completamente.
- Posee una gran imaginación. Pensamiento mágico.
- Se centra en la familia. Idealiza a sus padres, imita a los de su mismo sexo, tratando de ser como ellos o ellas. Siente curiosidad por las diferencias entre los sexos. Es la época de los "por qué". Cuando finaliza esta etapa el niño o niña habrá adquirido su identidad sexual psicológica.
- El niño se interesa sobre la muerte y sobre el origen de la vida.
- La escolarización le ofrece relacionarse con otras personas y en un ambiente diferente al habitual.
- Es muy importante que el niño se sienta querido y que lo acepten y lo valoren como una persona única. Evita comparaciones.
- Enséñale a hacer las cosas correctamente y felicítale cuando consiga hacerlas bien y anímale si no lo consigue.
- Escúchalo e intenta entender cómo se siente, habla con él/ella.
- Juega con tus hijos/as, comparte juegos, cuentos, actividades al aire libre, etc.
- Ayúdale a relacionarse con los demás.
- Establece normas y límites que pueda entender y cumplir.
- Evita el daño físico y emocional, no le grites, ni etiquetes (eres un niño malo, eres tonto...).
Aseo
Cuando acabe este periodo, debe vestirse solo/a. Puede necesitar ayuda para abrochar botones, cordones...
Un adulto debe ayudarlo en el baño, aunque ya tenga autonomía en muchos de los hábitos de aseo. Es muy importante que aprenda a limpiarse los dientes correctamente.
Sueño
Los niños/as a estas edades deben dormir entre 10 y 12 horas. Muchos de ellos dejan de dormir la siesta. Por las noches les cuesta mucho irse a la cama, ayúdale, favoreciendo un ambiente tranquilo y relajado, cuéntale un cuento, por ejemplo, y evita situaciones que los exciten (juegos, televisión, gritos...).
En caso de pesadillas, tranquilízalo, pero evita que acabe en tu cama.
Alimentación
- Aunque ya come solo, puede necesitar ayuda en algunos casos.
- Es normal si su apetito disminuye, ya que el ritmo de crecimiento es más lento y tiene menos necesidades.
- Debe hacer cuatro o cinco comidas diarias. Es muy importante que desayune bien en un ambiente tranquilo y sin prisas.
- Procura hacer al menos una comida al día en familia, para poder charlar y adquirir hábitos.
- Evita bebidas estimulantes y gaseosas.
Tiempo libre
- El juego ayuda al niño/a a desarrollar su personalidad, a conocerse a sí mismo y a los demás, a disfrutar y a entretenerse.
- Juega representando personajes y situaciones de su día a día.
- Aunque cada vez juega más en grupo, aún no acepta bien las reglas y suelen enfadarse si pierden.
- Procura que vea la televisión menos de una hora al día y por supuesto evita escenas violentas o inapropiadas para su edad.
Salud
Salvo que el médico diga lo contrario y siempre que el niño/a esté sano/a, es recomendable una visita anual al pediatra, para que valore el desarrollo físico y psíquico, peso, talla, dentición (al final de esta etapa se empiezan a caer los primeros dientes) y vacunación.
Prevenir accidentes
- Aprovecha los juegos para explicarle los riesgos de ciertas conductas (cruza la calle, los peligros en la cocina...).
- Evita poner sillas, taburetes u objetos donde puedan subirse, cerca de las ventanas. Coloca protección en los barrotes de las terrazas si están muy separados.
- Ofrécele juegos y juguetes adecuados para su edad y que cumplan las normas de seguridad. Mucho cuidado con las piezas y objetos pequeños.
- Cuando vayas por la calle con él, cruza siempre respetando las señales.
- No dejes de vigilarlo en columpios, toboganes, zonas de juego, parques...
- Enseña al niño/a a que se baje del coche por la puerta más cercana a la acera. Durante el viaje debe ir con los sistemas de seguridad adecuados.
- En piscinas y playas, debes vigilarlo siempre aunque ya sepa nadar.