Todas las mujeres se lo plantean tarde o temprano... Algunas a una edad temprana, otras una vez que su vida emocional y profesional se ha estabilizado. Sí, el deseo de tener un hijo existe. Pero si dar a luz es una de las cosas más bonitas de la vida, ¡no todas estamos preparadas para ello al mismo tiempo! No te preocupes, déjanos ayudarte a tomar esta decisión que cambia la vida con estas preguntas.
¿Eres tú o la sociedad?
Al ser mujer, se da por sentado que un día vas a tener un bebé. Por desgracia, vivimos en una sociedad en la que se espera que una mujer tenga un bebé en cuanto se case. Muchas mujeres no están preparadas para tener un hijo, pero su familia, sus amigos, su entorno (sí, me refiero a esas tías entrometidas y a los vecinos cotillas) y muchas veces, incluso la pareja, la presionan para que tenga un bebé. Si estás planeando o incluso pensando en tener un bebé sólo por la presión de la sociedad, entonces es la razón más equivocada para tener un bebé. Este es el momento de pensar en lo que sientes; estás realmente preparada mentalmente o incluso físicamente, olvídate de lo que digan los demás y haz lo que sientas.
Problemas en la relación
Toda relación experimenta problemas en un momento u otro, puede ser desde discusiones hasta problemas de compatibilidad, intimidad, tiempo, confianza o preocupación por el dinero. La solución más conocida en la que se piensa es tener un bebé. Las parejas piensan que tener un bebé resolverá todos sus problemas (incluso nuestros padres o la sociedad nos sugieren que tengamos un bebé), pero no es en absoluto cierto. Cuando tu relación no es estable y decides tener un bebé, indirecta o directamente impones esos problemas a tus hijos. Hoy en día hay muchos niños que están deprimidos sólo porque tienen problemas familiares, como padres divorciados o peleas constantes entre sus padres. Tener un hijo en un entorno así no es saludable. La pareja debe hablar y resolver todos esos problemas no resueltos entre ambos, llegar a una solución, hacer que la relación sea sana (ninguna relación es sana si no hay comunicación) y que sólo entonces piensen en tener un bebé. De esta manera podrán disfrutar de todos esos preciosos momentos cuando nazca el bebé.
El reloj biológico hace tic-tac
Dicen que nunca hay que preguntarle a una mujer su edad, pero eso no hará que el reloj biológico deje de funcionar. Las mujeres se estresan porque saben que si no lo hacen ahora, no lo harán nunca. Estoy segura de que está bien estresarse por esta razón, pero déjame preguntarte: ¿estás realmente preparada para ser madre? (Sé que es contradictorio, pero déjame explicarte). Las mujeres de hoy en día no se casan sólo porque se están haciendo mayores, sino que están dispuestas a esperar sólo para poder lograr algo en su vida; puede ser una carrera o practicar algún deporte o viajar o puede ser cualquier cosa... Así que intenta comprobar todos los puntos de tu lista de deseos antes de tener un bebé.
¿Estás preparada para ser desinteresada?
Ser madre significa ser la persona más desinteresada. Básicamente, una madre es una persona que da,
comparte y ayuda a su hijo a crecer. Cuando un bebé entra en escena, tienes que compartir lo más preciado, tu espacio personal y tu tiempo.
¿Estás preparada para asumir la responsabilidad?
¡¡¡¡¡Responsabilidad!!!!! La definición básica de responsabilidad es el deber de ocuparse de algo. La responsabilidad es una palabra muy utilizada, pero muy poca gente conoce el significado real de esta palabra. Responsabilizarse de un bebé es algo muy importante, básicamente cuidar de todas sus necesidades, de su salud y, lo que es más importante, criarlo como un individuo responsable. Cuando una persona hace algo malo, la sociedad siempre culpa a su educación.
Criar a un niño es una responsabilidad porque su futuro depende de los valores que le enseñemos y de cómo nos ocupemos de él y de sus problemas.
¿Eres financieramente estable?
Por último, pero no menos importante, el dinero: El dinero es un amo terrible, pero un excelente sirviente. Dicen que no se puede comprar el amor con dinero, es cierto, pero en este siglo, el dinero se ha convertido en la fuente de supervivencia. Si estás planeando tener un bebé tendrás que empezar a ahorrar dinero porque desde el primer día de tu embarazo comenzarán los gastos... cada céntimo cuenta. Mucha gente quiere dar a sus hijos lo mejor. Las parejas deberían tomarse en serio lo de reservar algo de dinero para el bebé y su futuro, porque la cruda realidad es que en el mundo actual nada es gratuito.
¿Cómo sé si estoy preparada para tener un hijo?
Si hay un deseo en ti que no puedes controlar, un deseo imparable de formar una familia, un pensamiento que se repite constantemente, probablemente sea el momento adecuado para ser madre. No tengas miedo al fracaso ni a lo que puedan decir los demás. Ser madre es algo que se aprende con el tiempo. Cuando te sientas preparada, tener a tu hijo en brazos te enseñará a ser una buena madre día tras día.
Si, por el contrario, el mero hecho de pensar en ser madre te produce ansiedad o frustración, si el miedo es más fuerte que la emoción, o si la idea de tener un hijo te causa problemas, es posible que tengas que recapacitar, esta inseguridad exagerada puede indicar que no estás suficientemente preparada.
Ser madre no es un pasatiempo ni una diversión, es una responsabilidad seria que tendrás toda la vida. Una madre nunca deja de serlo, aunque los hijos hayan crecido y tengan sus propias familias.
Por eso, toda mujer debe sentirse preparada para ser madre sin que se le presione de ninguna manera por su edad, su entorno o su situación. Ser madre significa estar dispuesta a dar tu tiempo para compartirlo con alguien que te necesita, a dejar de lado muchas veces tus placeres y objetivos para probar otros nuevos.
Nunca tomes la decisión de ser madre obligada por nadie. La decisión de ser madre será probablemente una de las más importantes de su vida. Debe ser una elección tuya y de tu pareja, que debe estar bien pensada y planificada.
Es importante tener claro que tener un hijo cambiará tu vida por completo. Si lo tienes claro y no te importa este nuevo reto, estás preparada para embarcarte en la nueva aventura de la maternidad.
Además, ser madre no significa que no puedas disfrutar de nada en la vida, ni mucho menos, pero tienes que ser consciente de que la vida que vas a empezar será muy diferente a la que tenías hasta ahora.
A partir de ahora, tus planes, tus objetivos y todo lo que decidas hacer debe basarse en tu hijo. Piensa que muchas veces tus necesidades se solaparán.
No tengas miedo, pronto te darás cuenta de que tener un hijo es una experiencia maravillosa que te hará feliz y sacará lo mejor de ti. Te da una nueva oportunidad de sonreír cada día. Ser madre te hará sentirte imprescindible en la vida de esa nueva persona que llegará indefensa a este mundo y será, sin duda, la mejor experiencia que hayas vivido.