Desde hacía semanas, el sol ya no calentaba como en los calurosos días de verano. Además, la brisa del viento se paseaba agitando las copas de los árboles y la música de las hojas chocando unas con otras se dejaba escuchar por cada rincón. Ya no se veían flores nuevas y las que aún quedaban, empezaban a marchitar... Cuento de Eva Alonso basado en el tercer movimiento de "El Otoño" de Vivaldi.
Enviado Por Juventudes musicales de Alcalá de Henares.