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En la noche de San Juan, una pequeña niña llamada María decide hacer una hoguera en el jardín de su casa después de que su familia decide no ir a la playa debido a la enfermedad de su abuelo. A pesar de estar sola al principio, María recibe una sorpresa inesperada que hace que la noche se convierta en una de las más especiales de su vida.

La Hoguera de María en la Noche de San Juan

Había una vez en un pequeño pueblo costero, una tradición muy especial que se celebraba cada año en la noche de San Juan. La gente del pueblo se reunía en la playa para encender hogueras y celebrar el solsticio de verano. Se contaban historias, se cantaba y se bailaba alrededor del fuego.

María era una niña que vivía en el pueblo y siempre esperaba con ansias la noche de San Juan. Desde que era pequeña, su familia la llevaba a la playa para ver las hogueras y disfrutar de la fiesta. Pero este año, María estaba un poco triste, ya que su familia había decidido no ir a la playa debido a que su abuelo estaba enfermo y necesitaba cuidados.

Esa noche, mientras todos se reunían en la playa para celebrar, María se quedó en casa con su abuelo. La niña se sentía muy sola y triste, así que decidió hacer algo especial para animarse. Recordó las historias que había escuchado sobre la noche de San Juan y decidió hacer una pequeña hoguera en el jardín de su casa.

Recogió ramas y hojas secas y armó una pequeña hoguera en el jardín. Luego encendió el fuego y se sentó a su alrededor. Cerró los ojos y comenzó a imaginar que estaba en la playa, rodeada de amigos y familiares.

De repente, escuchó un ruido detrás de ella y se dio vuelta. Para su sorpresa, vio a algunos de sus amigos del pueblo parados allí con ramas y hojas secas en sus manos. Habían venido a su casa para unirse a su pequeña celebración.

María se emocionó mucho y juntos encendieron una hoguera más grande y se sentaron alrededor de ella. Cantaron y bailaron alrededor del fuego, contaron historias y se divirtieron mucho. Aunque no estaban en la playa, la noche de San Juan se convirtió en una noche muy especial para María y sus amigos.

Desde entonces, María siempre recordó esa noche como una de las más especiales de su vida. Aprendió que la magia de la noche de San Juan no depende del lugar donde se celebre, sino de la compañía y la alegría que se comparta con los demás.

FIN

©MenudosPeques

La historia de La Hoguera de María en la Noche de San Juan nos enseña que la verdadera magia de esta celebración no depende del lugar donde se celebre, sino de la compañía y la alegría que se comparte con los demás. María aprendió que incluso en momentos difíciles, la amistad y la familia pueden hacer que cualquier noche se convierta en una noche mágica e inolvidable.

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