Recursos Educativos - Teatros y Actividades dramáticas
El Patito Feo
Escenario: Paisaje con casas de campo.
En el escenario está la señora pata con los patitos, cuando entra la pata 1, y empieza a hablar el narrador.
NARRADOR: Cuando la señora pata acabó de incubar y nacieron los polluelos todos hicieron grandes elogios de los pequeños patitos, pero al rato la señora pato se dio cuenta que faltaba por romperse un huevo.
PATA 1: ¿Oh que patitos! Son preciosos. Enhorabuena, señora pata.
PATA MADRE: Gracias señora pata.
PATA 1: Pero aún falta un huevo por nacer.
PATA MADRE: Si, se está haciendo el remolón y me va a hacer esperar unos días.
NARRADOR: Pasaron unos días y cuando la pata madre ya empezaba a pensar que de aquel huevo no nacería nada, apareció un nuevo pollito, pero que susto se dio al verle.
PATITO FEO: ¡Piu, piu, piu!
PATA MADRE: Horror, que feo es.
PATA 1: Señora pata, ese polluelo no será de algún pavo, dejado en su nido por error.
PATA MADRE: Puede ser.
PATA 1: Es que no se parece en nada al resto de los polluelos.
NARRADOR: Cuando al día siguiente fueron al estanque y le vio nadar, a la pata madre no le quedó ninguna duda de que era un patito y no un pavo, por lo bien que nadaba, pero a pesar de todo, los demás patos le insultaban..
PATITO 1: Patito feo, patito feo.
PATITO 2: Cuello largo.
PATITO 1: Plumas cortas.
PATITO 2: Pequeño monstruito.
PATITO 1: Eres horrible.
PATITO 2: ¡Aparta, no te arrimes a mí!
PATA MADRE: Ven aquí a mi lado y vosotros dejarle de insultar.
¿Qué mal os ha hecho el pobre?
NARRADOR: El pobre patito estaba desesperado.
PATITO FEO: ¿Qué culpa tengo yo de ser feo?
PATO PADRE: Ninguna hijo.
PATITO FEO: Pues entonces porque se meten conmigo
PATO PADRE: Si no fueras mi hijo, hasta yo te daría un picotazo.
NARRADOR: Tanto sufría el pobre patito que un día aprovechando un descuido de sus padres, huyó del corral y caminó durante días y días, hasta que llegó a una laguna, donde cansado y con mucha hambre se quedó dormido, hasta que le despertaron las burlas de dos patos silvestres.
PATO SILVESTRE 1: ¡Mira! que cosa más fea!
PATO SILVESTRE 2: ¡Pero si es un pato!
PATO SILVESTRE 1: ¿Has visto alguna vez un pato tan feo?
PATO SILVESTRE 2: Jamás y seguro que no lo volverá a ver más.
(Suenan unos disparos, caen abatidos los dos patos silvestres y llega un perro)
PATITO FEO: ¡Este perro me despedaza!
PERRO: ¿Qué será esta cosa tan fea?
(Se arrima le mira y da dos vueltas a su alrededor)
PERRO: No merece la pena, esta cosa no vale para nada, es tan fea que si le llevo esto a mis dueños seguro que se enfadan conmigo.
(Coge a los otros patos y les saca fuera)
PATITO FEO: Soy tan feo que ni los perros se atreven a morderme.
NARRADOR: Cuando se marchó el perro el patito siguió andando y se encontró con un gato y una gallina.
PATITO FEO: ¡Hola! Me puedo quedar aquí con vosostros?
GATO: ¿ Quién eres tú?
PATITO: Soy un patito.
GALLINA: Pues mira que eres feo.
GATO: ¿Sabes arquear el lomo y hacer ronrón?
PATITO FEO: No
GALLINA: ¿Sabes poner huevos?
PATITO FEO: Tampoco.
GATO: Pues nuestra ama no te va a querer.
GALLINA: Si no sabes hacer nada, es mejor que te vayas ahora mismo de aquí, antes de que te eche nuestra ama.
NARRADOR: El patito humillado, agachó la cabeza y se fue.
(Se va hacia un lado y salen los otros)
NARRADOR: Llegó el invierno y el patito estaba a punto de quedarse congelado cuando lo encontró una campesina y lo llevó a su casa.
CAMPESINA: Pobre patito, está medio congelado. Ven conmigo que yo te cuidaré.
NARRADOR: Allí pasó todo el invierno, pero un día intentó aprender a volar y tiró al suelo un jarrón y lo rompió.
CAMPESINA: Maldito pato, encima de que te he cuidado. ¡Ven aquí, que te voy a dar...!
(El patito escapa y vuelve a entrar convertido en cisne)
NARRADOR: El patito escapó corriendo y llegó a un lago.
PATITO FEO (cisne): Vaya desgracia la mía nadie me quiere.
(Entra un cisne)
PATITO FEO (cisne): ¡Qué bonito es! Ya podía haber sido yo como él. Me acercaré para ver si me deja estar con el.
PATITO: Hola, ¿quién eres?
CISNE: Yo soy un cisne y siempre vengo por estas fechas a este lago.
PATITO FEO (cisne): Pues yo soy un patito, que como soy muy feo nadie me quiere.
CISNE: ¡Qué tonterías dices! ¡Tú no eres un pato, tú eres un cisne! ¡Mirate en el agua!
NARRADOR : El pobre patito se miró en el agua y casi se desmaya del susto, pues le habían cambiado las plumas y era un verdadero cisne blanco.
PATITO FEO (cisne): Es verdad, soy un cisne como tú (comienza a dar saltos).
NARRADOR: A partir de ese día el patito fue muy feliz con sus nuevos compañeros.
**FIN**