Para conservar tu piel sana y que funcione adecuadamente necesitas cuidarla y limpiarla a diario.
La línea de cuidado de la piel Caudalie es ideal para mantener tu piel sana y resplandeciente. Lo recomendable es que limpies tu cara por la mañana y por la noche para eliminar restos de maquillaje, suciedad, grasa y pieles muertas. A continuación puedes usar un tónico o agua refrescante que dejará tu cutis perfecto. Una vez a la semana puedes usar una crema exfoliante para eliminar las impurezas y restos de la descamación de la piel.
Elige cremas apropiadas para tu tipo de piel y edad y aplícalas mañana y noche con un suave masaje. También es conveniente que una vez a la semana te pongas una buena mascarilla, cubras tus ojos con algodones empapados en manzanilla o en algún extracto específico para el contorno de ojos y aproveches para relajarte unos minutos.
Ten en cuenta que la falta de cuidados, un adelgazamiento rápido, las hormonas, el estrés y el clima pueden acelerar el envejecimiento. Si tienes la piel deshidratada y reseca, los músculos van perdiendo su firmeza y acaban cayendo. Además, la piel se afloja y se endurecen las fibras colágenas, dando origen a las arrugas.
Donde primero suelen aparecer las arrugas es en la zona piramidal (puente nasal), contorno de los ojos y entre las aletas de la nariz y la comisura de los labios. Todo esto acompañado de flacidez muscular. Una vez se asientan las arrugas es más difícil hacerlas desaparecer, por eso es tan importante el cuidado y mantenimiento diario.
¿Sabes cuál es tu tipo de piel?
- Piel grasa: causada por la mayor actividad de las glándulas sebáceas. Las personas con piel grasa tienen los poros grandes y abiertos. Son propensas al acné y suelen tardar más en desarrollar las arrugas.
- Piel seca: causada por una menor actividad de las glándulas sebáceas, condiciones ambientales o por envejecimiento. Se irrita con facilidad. Con el paso del tiempo se vuelve más seca y además las arrugas aparecen más rápidamente.
- Piel normal: Es suave y de textura fina. Suele irse resecando con el envejecimiento y por factores ambientales.
- Piel mixta: con regiones grasas (frente, nariz) y otras zonas secas.
Recomendaciones para el cuidado de la piel:
Pide asesoramiento a los profesionales de la salud y la belleza para que te indiquen los productos idóneos para tu tipo de piel.
Evita adelgazar rápidamente.
Realiza gimnasia facial y date masajes para tonificar la zona.
Desmaquíllate siempre antes de irte a dormir.
Siempre que puedas acude a un centro de belleza para hacerte una limpieza con mayor profundidad y tratamientos específicos.
Evita las radiaciones solares. Usa protección alta siempre que te vayas a exponer al sol. Éste resaca la piel y además favorece la aparición de pecas y manchas.
Evita fumar.
Para mantener la piel perfecta también es muy importante seguir una alimentación sana y equilibrada donde abunde la fruta, verduras, hortalizas, productos integrales y pescados. Y por supuesto se deben evitar los dulces, las grasas y los fritos.
No abuses de la sal y toma al menos un litro y medio de agua al día.
Para los labios y contorno de ojos elige productos específicos ya que es una zona con la piel más delicada.
Y por supuesto no te olvides del resto de tu cuerpo, especialmente de las manos y de los pies, ambos muy castigados en el día a día. Mantén un aseo diario y exfolia la piel una vez a la semana. Aplícate aceites o cremas hidratantes acompañadas de un buen masaje tonificante. Y por supuesto no abuses del sol.
Recuerda, los buenos hábitos de autocuidado de tu cuerpo te ayudarán a retrasar el proceso natural del envejecimiento y a prevenir muchos de los problemas que aparecen en la piel.